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Emmanuel Sanders critica castigo que recibió por burlarse de un rival

DENVER -- El receptor abierto de los Denver Broncos, Emmanuel Sanders, vio cómo un dedo --su dedo índice, para ser exacto-- le costó a su equipo posiblemente cuatro puntos el domingo en la derrota 23-20 ante Los Angeles Rams.

Sanders indicó que su castigo por burlarse de un rival en el primer cuarto "le costó a mi equipo", pero agregó que también fue una señal que "la liga se está suavizando".

Con los Rams arriba 6-0 hacia el final del primer cuarto y los Broncos en cuarta y 5 en la yarda 44 de Los Angeles, el mariscal de campo de Denver, Case Keenum, se conectó con Sanders en lo que Sanders creyó en principio que era un touchdown de 44 yardas.

En cuanto Sanders eludió una tacleada, apuntó con el dedo el rostro del esquinero de los Rams, Troy Hill, provocando un castigo por burlarse del rival.

"Para mí, sinceramente, siento que la liga se está suavizando", declaró Sanders. "Me estoy divirtiendo. No le hice ninguna locura al tipo además de decir, 'Te tengo en esa jugada', apuntando mi dedo hacia él. [El oficial] lanzó el pañuelo, lo que es una locura porque siento que he estado en la liga nueve años y he estado apuntando a rivales, miren mis videos, he apuntado a rivales todo el tiempo.

"Fue un gran lanzamiento de Case. Hice una jugada grande, las emociones son altas. No es que caminé hacia él y le di un cabezazo o alguna locura. Pero le costó a mi equipo".

Como touchdown, el castigo se habría aplicado en la patada de salida posterior. Sin embargo, como jugada de anotación, la jugada fue revisada con la repetición y se determinó que Sanders salió en la yarda 1 de los Rams.

Así que se aplicó el castigo y el balón fue colocado en la yarda 16. Los Broncos sólo ganaron seis yardas en las siguientes tres jugadas combinadas y Brandon McManus tuvo que intentar un gol de campo de 28 yardas.

Fue una jugada que creció en importancia a medida que avanzaba el partido, ya que los Broncos vinieron de atrás de una desventaja 20-3 para ponerse 23-20 en los minutos finales antes de fallar en su patada corta.

"No hay victorias morales. Nuestros muchachos jugaron duro, eso es evidente, pero tenemos que jugar mejor en cuanto a castigos", indicó el entrenador en jefe de los Broncos, Vance Joseph. "Él lo sabe mejor, lo sabe mejor, no vi lo que pasó. No puede hacer eso. Él lo sabe".