Adrián Beltré ya divisa el tramo final de su carrera, una que comenzó en 1998.
Cerca de cumplir los 37 años, el dominicano se mantiene como el pilar de los Vigilantes de Texas, entre los mejores antesalistas de la actualidad y, desde ya, objeto de debate sobre sus méritos para entrar eventualmente al Salón de la Fama.
Suma 2.767 hits en su trayectoria, incluyendo 413 jonrones, con sus cuatro selecciones en el Juego de Estrellas conseguidas en las últimas seis temporadas. Beltré inicia la campaña con 2.567 juegos disputados, sólo por detrás de los 2.719 de Alex Rodríguez entre los peloteros activos.
Pero si le preguntan, la ausencia de un anillo de la Serie Mundial es su asignatura pendiente. Y no quiere retirarse sin antes consagrarse campeón. Estuvo cerca en 2011, cuando Texas perdió por segundo año sucesivo en el Clásico de Octubre, al caer en siete ante los Cardenales de San Luis.
"Ganar una Serie Mundial es lo que hará más fácil tomar la decisión de cuánto más jugaré", dijo Beltré durante la pretemporada. "Si gano una Serie Mundial, será más fácil irme a mi casa cuando quiera".
Tranquilos, Beltré también piensa que tiene mucha batería para seguir produciendo y, lo más importante, el entusiasmo que le permite disfrutar jugar frente al trajín de los seis meses de una temporada regular.
Su sexto año en Texas debe marcar su rumbo. Tras completar el contrato de 80 millones de dólares por los anteriores cinco años, la franquicia hizo uso de una opción de 16 millones para retener a Beltré. ¿Le ofrecerán los Vigilantes una extensión o dejarán que se declare agente libre?
"Me ha tocado ser agente libre tres veces en mi carrera, no es nada nuevo", señaló. "Tengo que cumplir con mi trabajo y que pase lo que tenga que pasar. Yo me voy a concentrar en ayudar a mis equipos en lo que nos toca hacer, y eso es ganar la Serie Mundial".
Contra viento y marea, los Vigilantes quedaron primeros en la división Oeste de la Liga Americana. Pocos intuyeron ese resultado cuando al iniciar sus entrenamientos primaverales perdieron al as Yu Durvish por una lesión en el codo que precisó de la cirugía Tommy John, y al segunda base Jurickson Profar por un desgarro del hombro derecho.
De hecho, el equipo iba a la deriva al llegar a la pausa por el Juego de Estrellas, con cuatro juegos por debajo del porcentaje de .500. Pero ganaron 46 de sus últimos 74 partidos para rebasar a los Astros de Houston y alcanzar los playoffs. Ahí cayeron 3-2 ante los Azulejos de Toronto, en una trepidante serie de primera ronda, cuyo decisivo quinto juego tuvo como momento cumbre el jonrón de José Bautista -- soltando el bate por los aires -- para quebrar el empate.
Beltré lidió en esa campaña con un ligamento desgarrado en el pulgar izquierdo, arreglándoselas para disparar 18 jonrones con 83 impulsadas. Un esguince en la espalda le impidió actuar en los primeros dos partidos de la serie de división contra Toronto. Se operó el dedo durante el receso, teniendo tiempo de sobra para sanar: "es un alivio poder hacer todo sin molestias".
EL NUEVO AÑO
En su primera temporada, Jeff Banister fue consagrado como Manager del Año en la Americana, pasando al olvido el golpe de una campaña previa de 95 derrotas. Su misión es evitar dar un paso atrás.
Con su tercera base recuperado, una campaña completa de Cole Hamels y el regreso de Darvish pautado para mayo, los Vigilantes están confiados que disponen de los recurso para contener el empuje de los Astros y revalidar el banderín en la división.
Derek Holland, Colby Lewis y el zurdo venezolano Martín Pérez completan la rotación abridora.
"En el papel es una rotación superior con respecto al grupo que comenzó el año pasado", dijo Banister. "Nombres más atractivos y con más experiencia".
LANZALLAMAS EN EL BULLPEN
Los Vigilantes comparten su complejo de pretemporada en Surprise, Arizona, con los Reales de Kansas City, los campeones defensores de la Serie Mundial.
Otro elemento que comparten es que tienen un bullpen igual de dominante al de Kansas City. Shawn Tolleson (35 rescates desde mediados de mayo), Sam Dyson, Jake Diekman, Keone Kela y el recién llegado Tom Wilhlemsen lanzan humo. Cualquiera de los cinco podría ser un cerrador.
LA IRRUPCIÓN DE ODOR
La lesión de Profar abrió una plaza para Rougned Odor en la intermedia, aunque al venezolano empezó mal. Fue enviado a las menores a comienzos de mayo, regresó a mediados de junio y se destapó en los siguientes 91 juegos al batear para .292 y slugging de .527.
Ese no fue el único desempeño sorprendente en la alineación diaria. El primera base Mitch Moreland, el jardinero central Delino DeShields Jr. y el receptor venezolano Robinson Chirinos también se destacaron.
Odor apenas tiene 22 años, una estrella ascendente, con su compatriota Elvis Andrus como compañero de doble plays.
Profar, de 23 años, iniciará la campaña en las menores, donde también tienen a los cotizados prospectos como el tercera base Joey Gallo y el jardinero dominicano Nomar Mazara.
CONCLUSIÓN
Si Darvish regresa sin problemas, los Rangers van a estar bien encaminados para pelear por su primera Serie Mundial.
Lo que puede conspirar en contra de Texas es el efecto de la edad de varios de sus veteranos.
Beltré, por ejemplo, tuvo su OPS más bajo desde 2009, una campaña menguada por lesiones cuando estaba Seattle. Josh Hamilton (35 años), Shin-Soo Choo (33) y Prince Fielder (32) tampoco son jovencitos. Hamilton se perderá el primer mes mientras se recupera de una lesión en la rodilla izquierda. Ian Desmond, un infielder toda la vida, fue contratado para cubrirle por mientras.