El sábado se llevaron a cabo varias carteleras importantes, incluida una defensa del título de peso welter de Terence Crawford, un regreso a casa para Teófimo López y una sorpresiva derrota de Josh Warrington. Mike Coppinger, Ben Baby y Nick Parkinson reaccionan a la acción e intentan dar sentido a tres carteleras peculiares efectuadas en diversos rincones del planeta.
Bueno, aquí vamos de nuevo con Terence Crawford y Errol Spence Jr.
Baby: Por ahora, bien podría ser un guion para Terence "Bud" Crawford.
Primero, se hablará mucho sobre un posible enfrentamiento con el también campeón de peso welter Errol Spence Jr., el principal rival de Crawford. Entonces la pelea no se hará, con ambos lados manteniendo que están uno encima del otro mientras mantienen la puerta abierta para que suceda. Mientras todos esperan, Crawford pelea contra alguien más y se ve muy bien mientras los fanáticos comienzan a soñar despiertos con ese enfrentamiento entre Crawford y Spence.
Pero lo que Crawford no dijo después de la victoria por nocaut del sábado sobre David Avanesyan en el CHI Health Center en Omaha, Nebraska, muestra por qué la idea de un campeonato indiscutible parece una ilusión.
Cuando se le dio la oportunidad, Crawford ni siquiera llamó a Spence por su nombre cuando se le preguntó directamente sobre la situación.
"Con suerte, podemos ir a la mesa de negociación y estas grandes peleas se producirán en un futuro cercano", dijo Crawford en su entrevista posterior a la pelea.
Crawford (39-0, 30 KO's) proporcionó una de las victorias más dramáticas de su carrera como campeón de peso welter, que comenzó en 2018 cuando venció a Jeff Horn. Después de una complicada fase de apertura el sábado, Crawford derribó a Avanesyan con un uppercut de izquierda, seguido de un gancho de derecha que rápidamente puso fin a la pelea.
Y tan pronto como terminó la pelea, la gran pregunta sobre un posible enfrentamiento con Spence continuó. Cada vez que Crawford y Spence pelean contra otros oponentes, se siente como los combates de relleno mientras el deporte espera el evento principal que aún no ha llegado.
Spence está promocionando una pelea el 17 de diciembre en Showtime con el peso ligero Frank Martin, el primer peleador firmado con la promotora de Spence Man Down Promotions. Hablando con ESPN a principios de esta semana para promover la pelea de Martin contra Michel Rivera, Spence dijo que cree que un enfrentamiento con Crawford no ha pasado su fecha de vencimiento, dado que ambos hombres continúan teniendo grandes actuaciones.
"Todavía me interesa y todavía quiero pelear con él", le dijo Spence a ESPN. "¿Con quién más preferirías verme pelear que contra uno de los mejores peleadores del mundo y a él peleando contra mí, también uno de los mejores peleadores del mundo?"
Spence continuó con la promoción en la sombra de la pelea de Crawford el sábado, cuando lanzó una camiseta a la venta que mostraba un tiburón, que representa el apodo de Spence, tocando puertas como si fuera Grim Reaper, buscando a Crawford a continuación.
Pero en todo caso, simplemente continuó la guerra fría más grande del boxeo.
Durante años, los fanáticos han pedido a gritos que Spence y Crawford se enfrenten. Sin embargo, con cada año que pasa, otros combates convincentes han socavado ese zumbido. Una de ellas es una pelea entre los pesos superligeros Ryan García y Gervonta "Tank" Davis que está tentativamente programada para el próximo abril en caso de que cada uno supere sus respectivas peleas de puesta a punto.
Spence y Crawford se pelearon en Twitter en noviembre cuando los fanáticos intentaron analizar las culpas por las últimas negociaciones fallidas. Cuando se le dio la oportunidad después de su gran victoria sobre Avanesyan, Crawford podría haber ejercido más presión pública sobre Spence para que la pelea se llevara a cabo.
En cambio, Crawford se mantuvo vago sobre sus planes, que no están vinculados a ningún promotor desde que cortó lazos con Top Rank el año pasado y firmó un contrato de una pelea con BLK Prime para el combate del sábado. Eso podría ser lo mejor, dado todo lo que ha sucedido este año.
Con Crawford, de 35 años y envejeciendo, y Spence, de 32, constantemente mirando un posible ascenso al peso superwelter, ambos hombres podrían estar mejor atendidos si se enfocan en nuevos oponentes que son opciones más realistas. Hay varios pesos welter jóvenes y emocionantes que Crawford podría enfrentar, mientras que a Spence no le faltarán opciones.
Crawford demostró que todavía tiene un gran impacto y es capaz de una actuación sublime. Una pelea contra Spence aún podría ser tan grande como los fanáticos del boxeo han imaginado, pero las acciones del sábado demostraron que simplemente hablar de esa mega pelea es difícil. Hacer que suceda es aún más difícil.
Teófimo López necesita reconstruir su carrera, no retar a campeones de las 140 libras
Coppinger: Teófimo López estaba en la vía rápida hacia el estrellato. Después de su victoria sobre Vasiliy Lomachenko que coronó a López como campeón indiscutible de peso ligero y lo colocó en la lista libra por libra, las posibilidades parecían infinitas para el talentoso golpeador.
Una sorpresiva derrota ante George Kambosos Jr. en su pelea de seguimiento dejó a López buscando respuestas. Y después de una controvertida victoria por decisión dividida sobre Sandor Martin el sábado en Nueva York, el lugar de López entre los boxeadores de élite del deporte está en peligro, si no es que ya ha desaparecido.
Contra Martín, López (18-1, 13 KO's) no se parecía en nada al poderoso pegador que se abrió paso hasta la cima. A menudo lanzaba un solo golpe a la vez, y no usaba su jab con consistencia. Y aunque después de la pelea retó a los mejores en las 140 libras, los campeones Josh Taylor y Regis Prograis, es difícil ver a López compitiendo con ellos, y mucho menos derrotándolos.
No hay duda de que López sigue siendo extremadamente talentoso, y es lo suficientemente joven como para volver a la normalidad a los 25 años. También sería injusto atribuir la deslucida actuación del sábado solo a López. Martín tuvo mucho que ver con la apariencia de López. El peleador español es un zurdo astuto con un jab excelente y mucha confianza luego de su sorpresiva victoria sobre Mikey García el año pasado. Martín también es un peleador fuerte de 140 libras que claramente fue el hombre más grande contra López, un boxeador de 135 libras desde hace mucho tiempo que hace campaña en el peso superligero por segunda vez.
"No sé si todavía lo tengo", le dijo López a su padre y entrenador, Teófimo López Sr., después. "¿Todavía lo tengo?"
Por el momento, López no parece tenerlo. Cómo redescubre la magia que lo convirtió en una estrella podría ser un proceso largo. Una pelea contra un oponente menor, o dos, podría ser para restaurar la confianza que tanto necesita. Tal vez López incluso necesite un descanso del desgaste mental que este deporte increíblemente exigente impone a sus practicantes. Logró mucho rápidamente en el boxeo y lidió con una letanía bien documentada de problemas fuera del ring.
Por ahora, López debería olvidarse de perseguir a los campeones que retó después y concentrarse en reconstruirse. Con su combinación de velocidad y potencia, no hay motivo para que no pueda recuperar su forma.
Martín, por otro lado, tiene derecho a sentirse engañado. Aceptó la asignación con tres semanas de anticipación y realizó otra actuación impresionante en el camino. Aunque Martín (40-3, 13 KOs) pareció ganar, la pelea fue cerrada. ESPN anotó 95-94 para Martin desde el ringside, pero no hay excusa para el conteo de 97-92 de un juez.
"Para un juez, solo gané dos rounds", dijo Martín, de 29 años. "¿En serio? Hubo dos caídas. El árbitro no contó una de las caídas.
"Falló todos sus golpes. Esa es una clase magistral de boxeo. Eso es un robo. Pero ese es el deporte del boxeo".
El deporte del boxeo también tiene que ver con los regresos, y López buscará organizar el suyo una vez más.
Josh Warrington se está quedando sin opciones a nivel de campeonato
Parkinson: La derrota por decisión mayoritaria de Josh Warrington ante Luis Alberto López, que le costó a Warrington su título mundial de peso pluma de la Federación Internacional de Boxeo (FIB), lo deja con Leigh Wood como su mejor opción para convertirse en campeón de peso pluma una vez más.
Antes de enfrentarse a López, Warrington, de 32 años, había hablado sobre su ardiente deseo de viajar a los Estados Unidos y enfrentarse a uno de los grandes nombres de la división, pero esta derrota lo dejó con una mala mano en la mesa de negociaciones. El campeón del Consejo Mundial de Boxeo (CMB), Rey Vargas, el campeón de la Organización Mundial de Boxeo (OMB), Emanuel Navarrete, o incluso Mauricio Lara, quien detuvo a Warrington (31-2-1, 8 KOs) en febrero de 2021, probablemente pasen por alto a Warrington ahora.
Si una oportunidad por el título está en su futuro, es probable que la mejor opción de Warrington ahora sea quedarse más cerca de casa con Wood, quien dijo que la gran cantidad de seguidores del excampeón en Leeds, Inglaterra, lo convierte en un oponente atractivo.
"Estaría dispuesto a darle una oportunidad", dijo Wood, de Nottingham en Inglaterra. "Mientras él esté llenando estadios, no terminará con eso. Desde un punto de vista personal, Josh es probablemente uno de los únicos boxeadores con los que podrías llenar un estadio. Él necesita volver a ganar ahora".
Wood (26-2, 16 KOs) noqueó a Michael Conlan en el último asalto de una de las mejores peleas de 2022 y no pelea desde marzo.