No veo a Teófimo ganando un combate a los puntos, tiene que noquear y hacerlo temprano porque Lomachenko trabaja de menos a más
Este sábado en Las Vegas, Vasily Lomachenko y Teófimo López chocarán en un combate de unificación por el título de campeón mundial de peso ligero por todos los organismos.
El ucraniano de 32, años es favorito 3 a 1 en las apuestas y en caso de concretarse su triunfo, podría ser la victoria que lo catapulte a la cima del boxeo mundial.
Lomachenko, con marca de 14-1 y 10 KO, ha sido campeón mundial en tres divisiones diferentes, desde pluma hasta ligero.
Este prodigio del boxeo contemporáneo, es un artista del cuadrilátero, ha logrado trasladar su éxito en el boxeo aficionado al terreno profesional. Lomachenko es para muchos el mejor peleador amateur de la historia junto a Teófilo Stevenson, Guillermo Rigondeaux, Félix Savón y Laszlo Papp.
Acumuló un récord de 396-1, dos veces campeón olímpico en divisiones diferentes y la derrota que tuvo ante Albert Selimov la vengó dos veces.
Lomachenko ha escrito mucha historia en solo 15 combates, no supo descifrar cuando apenas comenzaba su carrera profesional al duro mexicano Orlando Salido y terminó perdiendo una decisión dividida, no sin antes, poner al borde del nocaut al “Siri” con la marca de la casa, el golpeo al cuerpo.
Lomachenko ha desarrollado la virtud de modificar su día a día, junto a su padre y entrenador, Anatoly, han trabajado en preparaciones que incluyen métodos poco convencionales, trabajo de coordinación ojos-manos-pies, además de implementar mecanismos para potenciar la resistencia y respiración en alberca.
Estamos ante un peleador histórico que con apenas 15 peleas profesionales ha demostrado al mundo sus habilidades; Lomachenko es conocido por su juego de pies, cambio de ángulos, disciplina militar, velocidad, contragolpeo, ritmo de combate, determinación, experiencia y mentalidad. Es un tipo que ya dejó atrás el mejor momento de su vida física deportiva, sin embargo, le alcanza para derrotar con autoridad a peleadores de élite que lo superan en talla y corpulencia.
Lomachenko y Teófimo dieron el límite del peso ligero el viernes en Las Vegas, registraron 135 libras y están listos para protagonizar una batalla que se antoja memorable. El hondureño no será presa fácil, representa un peligro de verdad para el veterano; López es fuerte, con gran pegada y viene de deshacer en apenas dos rounds a Richard Commey para arrebatarle el título mundial ligero de la FIB.
Más allá de la destructiva pegada de Teófimo y su carácter extrovertido, no hay mucho que abarcar boxísticamente en su carrera; es un sólido peleador, pero que no ha enfrentado ni cerca la oposición de Lomachenko.
El cruce es muy atractivo, López y su padre se han encargado de calentar el combate, se han metido a la mente del ucraniano quien ha declarado que quiere castigar y humillar al centroamericano para hacerle tragar sus palabras.
No hay duda que la confianza, auto estima y atributos boxísticos ponen a Teófimo en una buena posición, nunca se podrá subestimar a alguien que cree en sus habilidades y en sí mismo. López es de peligro, es de cuidado, es joven, voluntarioso e impetuoso, pero deberá tener cuidado ante un fuera de serie, que está buscando cobrar facturas.
No veo a Teófimo ganando un combate a los puntos, tiene que noquear y hacerlo temprano porque Lomachenko trabaja de menos a más, López deberá forzar las acciones, pelear en círculos y girar al mismo tiempo que el ucraniano; sabemos lo que puede hacer a la ofensiva, pero también es cierto que no sabemos cómo reaccionará en la adversidad.
A Lomachenko lo vimos en el piso contra Jorge Linares y se paró para noquear; lo vimos sufriendo con castigo a las zonas blandas de Luke Campbell y se sobrepuso para ganar con holgura.
Teófimo necesita hacer un gran trabajo sobre el ring el sábado para salir fortalecido y construir una sólida carrera de ahí en adelante, comenzó muy bien tiene marca perfecta de 15-0 con 12 KO, ya es campeón del mundo, pero si va a caer ante Lomachenko tiene que ser competitivo, no destruido, no arrasado en el cuadrilátero; sacarle provecho al enfrentamiento y terminar con esa sensación del deber cumplido, algo así como lo ocurrido con Linares, Pedraza y Campbell.
Pensamientos cortos:
Agradecer a todos los involucrados porque en estos tiempos, ofrecer un combate de unificación de este tamaño no hubiera sido posible sin la voluntad de todos. Lo común en medio de la pandemia, es decir: “es una gran pelea, pero nos la guardamos para cuando se permita el público en la arena”, no quieren perder los ingresos de la taquilla.
En esta época donde ser campeón del mundo es muuuuucho más fácil que en otros tiempos, el unificar campeonatos hace que el titular sea de verdad, lo valida.
¿Qué le irá a decir el CMB a Devin Haney, cuando le tenga que cobrar sanción por reconocerlo como campeón ligero del organismo, si Mauricio Sulaimán presidente del Consejo, ha dicho en esta semana que su campeón es Lomachenko? (franquicia).
Pronóstico:
Cuando alguien pega como lo hace Teófimo López, lo menos que se puede hacer es darle el beneficio de la duda, sin embargo, creo que la experiencia, el ritmo y el golpeo a las zonas blandas, lo quebrarán poco a poco. López jamás ha enfrentado a un peleador cercano al nivel de Lomachenko.
Lomachenko: KOT en 10 RDS.