Terence Crawford, campeón welter de la Organización Mundial de Boxeo (OMB) y número uno del ranking libra por libra de ESPN, no ha cambiado un ápice su preparación de cara a su compromiso contra Errol Spence Jr., titular unificado (AMB, CMB y FIB) de las 147 libras, pactado para la T-Mobile Arena de Las Vegas, Nevada, el 29 de julio.
"El campamento de entrenamiento va genial y no ha cambiado mucho", dijo Crawford en una conferencia virtual celebrada el miércoles. "Creemos firmemente en el dicho de que 'si no está roto, no intentes repararlo', y mantuvimos nuestro rumbo".
Desde que en marzo de 2014 Crawford ganó su primer título mundial (en peso ligero), efectuó otras 16 peleas titulares, para un total de 17 combates de campeonato. Su balance exhibe un impresionante 17-0 con 14 nocauts. Ricky Burns, Raymundo Beltrán y Viktor Postol son los únicos que fueron capaces de sobrevivir los 12 rounds.
Sin embargo, el 29 de julio enfrentará al peligroso Spence Jr., No.4 libra por libra y dueño de los otros tres cinturones mayores de la división, en lo que será uno de los combates más esperados del 2023, de cuyo desenlace emergerá un campeón indiscutible y el mejor boxeador sin distinción de peso.
"Esta pelea le pone la estampa a todo lo que yo he logrado en este deporte", confesó el peleador de Omaha de 35 años. "La gente ha intentado desmerecerme por esto y aquello. Esto lo solidifica todo. Esta es la pelea que el boxeo necesita.
"Errol y yo -añadió Crawford- nos comunicamos por teléfono para concretar la pelea más grande del boxeo. Ambos comprendemos nuestra tarea a la perfección, contábamos con los mismos objetivos y sueños. Ahora unimos fuerzas para asegurarnos de que contábamos con la madurez necesaria para que esta pelea se hiciera realidad".
La batalla contra Spence, un hombre más grande (5′ 9½″ /1.77m x 5′ 8″/1.73) que siempre ha peleado en el rango de 146-150 libras, le brinda la oportunidad a Crawford de desterrar cualquier duda de aquellos que cuestionan su éxito a pesar de que fue campeón mundial ligero y titular indiscutible en peso superligero.
"La diferencia de tamaño entre los dos no me preocupa. Miren a Jeff Horn y Shawn Porter", aclaró. "Esto no es nada nuevo. Yo siempre fui el de menor talla, hasta cuando yo peleaba en las 140 libras. Mientras más grande seas, más dura será tu caída".
Crawford (39-0-0, 30 KO's) llega al combate más importante de su carrera después de noquear en el sexto asalto al rocoso David Avanesyan (29-4-1, 17 KO's) en diciembre de 2022, para retener por sexta vez el cinturón welter que conquistó en junio de 2018 tras detener en el round 9 al australiano Jeff Horn (20-3-1, 13 KO's).
'Bud' Crawford indicó que la pelea contra Spence Jr. "se decidirá por quién se haya preparado de mejor manera y luego por quién esté a un nivel superlativo durante la noche de la pelea. De eso se trata.
"El objetivo siempre es ganar, primero que nada", remarcó Crawford. "Sin embargo, ustedes saben que Errol y yo siempre protagonizamos peleas emocionantes. No me cabe duda de que esta pelea no será la excepción".
Spence Jr., de 33 años y con récord invicto de 28-0-0, 22 KO's, es un zurdo que basa su boxeo en la presión asfixiante. Él peleó por última vez en abril de 2022, cuando sumó a su vitrina, por la vía del nocaut en el décimo asalto, el cinturón welter de la AMB que estaba en poder del cubano Yordenis Ugás.
"(Errol) ha enfrentado a tipos que ya sabían cómo perder. Yo le arrebato el '0' y el cinturón a mis rivales, y no vuelven a ser los mismos", subrayó Crawford. "No estoy pensando en una posible revancha, yo tengo pensado ganar esta primera pelea. La revancha no se me cruza por la cabeza, yo me enfoco en la actualidad.
"Sí, yo necesitó a Errol. Por la magnitud, el escenario y todo lo que rodea a esta pelea. Sin embargo, cuando se trata de mi legado, yo ya conseguí muchas cosas y ya pertenezco al Salón de la Fama. Esta victoria será la frutilla del postre", concluyó Terence Crawford.