Los escenarios cambian, las circunstancias pueden ser diferentes, los rivales pueden ser otros, el clima varía, pero hay algo que se mantiene inalterable en la 74ª temporada de Fórmula 1: Max Verstappen es el ganador. El neerlandés venció en el GP de Estados Unidos, anotado como la 19ª fecha de 2023 que se vivió por Star+ (no incluye México), para alcanzar su 15º festejo del año y el 50º de su carrera. Nada mal.
El neerlandés es apenas el quinto socio del exclusivo club de pilotos que llegaron a las 50 victorias en Fórmula 1. El resto: Lewis Hamilton (103), Michael Schumacher (91), Sebastian Vettel (53) y Alain Prost (50). El detalle, no menor, es que Max es el más joven en alcanzarlo, con apenas 26 años y 23 días. El resto llegó al medio centenar después de haber pasado los 30.
No fue para nada sencillo para Verstappen subirse al primer escalón del podio por 50ª vez. La victoria en Austin comenzó a complicarse el viernes durante la clasificación, cuando la penalización por exceder los límites de pista lo dejaron sin pole y condenado a largar sexto. El problema: en las diez visitas que la Fórmula 1 llevaba a Texas, en todas, el ganador había salido de la primera fila de partida. La empresa se ponía cuesta arriba al partir desde el sexto cajón.
Es cierto que el mismo Verstappen había dado muestras del fantástico ritmo de su Red Bull en el sprint. Sin embargo, no tardó media carrera en llegar a la punta, con una maniobra brillante para superar a Lando Norris, quien mandaba desde el pique al superar a Charles Leclerc (el monegasco largó desde la pole y su rendimiento se cayó a pedazos a medida que pasaban las vueltas). Pero Max no estaba cómodo porque tenía problemas de frenos en su Red Bull. Y así lo dejó bien en claro en las charlas con Gianpiero Lambiase, su ingeniero de pista, al bramar: “Estos frenos no están bien, no están como ayer. Son un pedazo de mi…”.
“Esperaba llegar antes a la punta, pero no quieres destrozar los neumáticos y tuve muchos problemas con los frenos, así que me ha llevado tiempo encontrar ese punto medio. Es increíble lograr aquí mi victoria número 50. Estoy muy orgulloso, por supuesto. Seguiremos empujando por más", dijo Verstappen.
Problemas al margen, Verstappen ganó una vez más. Eso sí, no fue cómodo el éxito. Y no solo por los inconvenientes en el RB19. Es que los rivales se acercaron, especialmente Mercedes, que estrenó un paquete de mejoras en Austin y terminó con un gran segundo lugar que lo ponen en pelea firme por el subcampeonato, especialmente ante los flojos rendimientos de Checo Pérez (quinto en Texas), actual segundo del Mundial.
Detrás de Verstappen había llegado en pista Lewis Hamilton, con un gran rendimiento de su Mercedes, remozado con el estreno de un nuevo paquete aerodinámico, el último que las Flechas de Plasta pondrán en pista este año y que también sirve para el W15 de 2024. El inglés había tenido un ritmo sensacional y hasta quedaba la duda sobre la estrategia que habían pergeñado desde las entrañas del team alemán de retrasar la primera detención en boxes. Pero todo cayó en saco roto tres horas después de la bandera de cuadros, cuando la FIA dictaminó la descalificación de Hamilton porque la madera del fondo plano no cumplía con la medida que figura en el reglamento técnico de la Fórmula 1. Debe tener diez milímetros, con un margen de un milímetro por el desgaste que puede sufrir por pasar por arriba de los pianos. Pero no llegó ni siquiera a nueve y finalmente fue descalificado.
RESULTADO DEL GP DE ESTADOS UNIDOS
Ese segundo puesto ponía a Hamilton más cerca de la chance de cerrar la temporada con el subcampeonato. Pero el segundo cero consecutivo que se lleva de una carrera principal (venía de abandonar en Qatar tras tocarse con su compañero George Russell) lo complican en su objetivo porque se estiró la ventaja de Checo Pérez, quien finalmente avanzó al cuarto puesto.
Con la eliminación de Hamilton, Lando Norris avanzó al segundo lugar. McLaren mostró nuevamente el rendimiento algo que alcanzó después del parón del verano boreal, pero aún le falta para sacar un triunfo. Y el podio, finalmente, lo completó Carlos Sainz con su Ferrari. La casa de Maranello sumó un nuevo capítulo de su auto veloz a una vuelta y complicado en el ritmo de carrera, pero rescató un tercer lugar con el español. Charles Leclerc, compañero de Sainz, pasó de un muy buen fin de semana a un GP para el olvido. Tras la pole position que consiguió el viernes, pasó a un rendimiento malo en carrera y hasta tuvo que dejar pasar al madrileño por orden del equipo. Y la mala llegó tres horas después: por el mismo motivo que Hamilton, el monegasco también fue excluido.
Sin tiempo de descanso, la Fórmula 1 seguirá su periplo y en cinco días ya estarán en pista en el GP de México, donde Verstappen irá por su triunfo 51. Pero después de Austin sabe que no será fácil.