El piloto de Alpine pudo girar este sábado después del gran trabajo de los mecánicos, quienes le armaron un auto nuevo. En la clasificación quedó eliminado en Q1 y largará 19º.
Solo Jack Doohan sabe cuán dolorida estaba su cuerpo y, especialmente, su orgullo. Con la confianza minada después del espeluznante accidente que sufrió en la segunda sesión de entrenamientos, al no cerrar el DRS en la primera curva, el australiano pudo participar del segundo día del Gran Premio de Japón, tercera fecha de 2025, gracias al gran trabajo de los integrantes del equipo Alpine, quienes trabajaron durante toda la noche para que tuviera un A525 listo para girar. Del destruido auto del viernes, solo quedó la unidad de potencia, el resto fue todo nuevo.
Doohan no la tuvo fácil. Seguramente con dolores en el cuerpo y con muy pocas vueltas debió salir a clasificarse. Es que no giró en la primera sesión porque debió cederle la butaca al novato Ryo Hirakawa. En la segunda llegó el virulento choque cuando apenas habían pasado siete minutos, y en la tercera, de este sábado a la mañana, debió soportar los dos períodos de bandera roja por el fuego que tomó el pasto seco (cinco veces en el fin de semana).
Con apenas 19 vueltas completadas, llegó a la clasificación. Y poco pudo hacer: quedó 19º y no superó la Q1. Fue su peor qualy del año en comparación con su compañero Pierre Gasly, porque quedó a 691 milésimas del francés, quien finalmente logró avanzar a Q2.
“Creo que la Q2 podría haber sido posible. Sé que tenía que seguir mejorando en cada vuelta. Siendo sincero, cometí un error al salir de la curva de la Cuchara, y si no lo hubiera hecho, probablemente habría llegado a la Q2. Así que no puedo estar muy enojado ni molesto por eso. Es solo que, lamentablemente, se dio así”, contó Doohan a los medios después de la clasificación.
Consultado directamente por el accidente del viernes, en el que el equipo comunicó que se debió a un error del australiano, quien no cerró el DRS al entrar a 300 km/h en la primera variante, Doohan optó por tirarla afuera. “Para ser honesto, preferiría no tocar el tema y simplemente dejarlo en el pasado y mirar hacia el futuro”.