Lewis Hamilton y Charles Leclerc quedaron rojos de bronca después de no poder finalizar en Zandvoort, 15ª fecha del Mundial.
Pasaron las vacaciones del verano boreal y en Ferrari recargaron pilas para llegar con nuevos bríos a la segunda parte de la temporada 2025 de Fórmula 1. Encauzar un poco un año difícil y, de ser posible, conseguir un triunfo, fueron los objetivos planteados en Maranello. Pero si la llegada al parón había sido en baja, el reinicio fue aún peor: doble abandono en el GP de Países Bajos, 15ª fecha del Mundial.
¿Algo más podía pasar? Sí, se llevó los dos autos rotos. Por distintos motivos, es cierto, pero tanto Lewis Hamilton como Charles Leclerc terminaron con sus SF-25 contra el muro. Primero fue el inglés, la pomposa contratación que la marca italiana hizo para 2025. El heptacampeón viene de capa caída, muy caída. Tanto, que en Hungría él mismo llegó a definirse como “un completo inútil”, después de la clasificación del GP de Hungría, en el que quedó 12º, mientras el monegasco disfrutaba de la pole. Con pilas recargadas, llegó a Zandvoort, pero todo se terminó en la 22ª vuelta, cuanto se estrelló contra la pared en la tercera curva, la misma en la que Lance Stroll destruyó su Aston Martin el viernes.
"Perdí la parte trasera y eso fue todo”, dijo Lewis, quien, en su última imagen de pista, ya fuera de su Ferrari, levantaba los restos del alerón delantero. “Puedo contar con los dedos de una mano las veces que cometí un error así en mi carrera. Estoy triste por el equipo. Queríamos sumar esos puntos para el equipo hoy, y sinceramente sentí que tenía el ritmo de los coches que iban delante, así que esperaba ver un progreso real en la carrera y eso fue lo que pasó", agregó.
Con Hamilton fuera de combate, las esperanzas de la Scuderia estaban puestas en Leclerc, el único del team que subió al podio en 2025 (cinco veces). Pero… Se encontró en pista con Kimi Antonelli. El jovencito piloto de Mercedes tuvo un inicio muy bueno en su primera temporada de F1, pero desde Emilia-Romagna en adelante, justo la carrera de su casa, cometió varios errores y solo con el tercer lugar de Canadá salvó la ropa. El corredor de las Flechas de Plata directamente sacó de carrera a Leclerc.
El piloto de Ferrari no pudo controlar su auto, que se salió en la curva tres y chocó con la pared.
El monegasco paró en boxes y al salir se encontró con Kimi en la… curva 3. Leclerc, con mayor velocidad, lo superó e iba por la parte alta del peralte. Antonelli, por abajo, fue contra la Ferrari y directamente la chocó. Charles entró en trompo, golpeó la pared y ahí quedó. Literalmente ahí se quedó, porque vio las últimas 20 vueltas de carrera sentado en el pasto, enviado mensajes desde su teléfono móvil. “Fue un error de Kimi. En esta pista hay que ser muy agresivo para pasar autos y él intentó serlo. No lo describiría como un error de novato. Creo que es un error que puede ocurrir el primer o el quinto año”, analizó el piloto de la Rossa.
Ferrari no sufría un doble abandono en carrera desde el GP de Canadá 2024 (problemas de motor para Leclerc y accidente de Sainz). Este año se fue con doble cero de la carrera larga de China, pero por la descalificación de ambos autos en la técnica. El cuarto puesto de George Russell dejó a Mercedes a tan solo 12 puntos de Ferrari en la tabla de Constructores, en la que, por ahora, los italianos están en el segundo lugar. En este panorama, la Scuderia llegará a la carrera de su casa, en Monza, el próximo fin de semana.