Tras un primer entrenamiento plagado de novatos en el que se metió top ten, el piloto argentino volvió a sufrir con la falta de rendimiento del A525 y quedó 18º.
Solo un milagro puede entregar una alegría en Alpine en la recta final de la 76ª temporada de Fórmula 1. Un perro verde como el GP de San Pablo de 2024, cuando la lluvia mezcló la baraja y se llevaron un impensado 2-3. Por estos días, ni el diluvio universal pareciera poder entregar algún hálito de esperanza en Enstone para mostrarse competitivos. No es impensado el presente: al flojo rendimiento del año pasado se profundizó en 2025 ante la determinación de Flavio Briatore de poner todo el esfuerzo para el nuevo auto que llegará con el cambio de normativa en la próxima temporada. Sin actualizaciones ni desarrollos, el rendimiento del A525 fue en caída libre. El italiano, mandamás del equipo, reconoció el error en Países Bajos porque pensó el resto de las escuderías seguirían el mismo camino. Se equivocó y hoy su equipo navega cómodamente en el fondo de la tabla. El segundo entrenamiento del GP de Ciudad de México, 20ª fecha de la temporada, fue una muestra más de la debilidad crónica del coche: Franco Colapinto fue 18º y su compañero Pierre Gasly, 20º.
El noveno lugar que firmó el argentino en el primer ensayo fue un espejismo. Una tanda totalmente inusual que contó con el récord de nueve novatos en pista porque los equipos tienen que cumplir con la normativa de los rookies en la primera práctica libre. Franco superó a ocho de los inexpertos (Arvid Lindblad quedó delante) y a tres titulares, dos de ellos que no habían utilizado el compuesto blando (Alex Albon e Isack Hadjar). Pero cuando llegó el segundo entrenamiento y salieron los titulares, la realidad de Alpine quedó expuesta.
Colapinto completó 31 giros en la segunda sesión. Su programa se dividió en dos tandas: diez giros con cubiertas medias y el resto, con blandas. En su primer intento con el compuesto más suave marcó 1m18s721, el que sería su mejor registro al final del día. De entrada, se metió entre los diez, pero, claro, cuando el resto comenzó a girar con las gomas rojas llegó el golpe de realidad. Su posición en el clasificador fue cayendo hasta caer al puesto 18, solo por delante de Alex Albon y Gasly. El tailandés de Williams había conseguido cerrar dos muy buenos parciales en su intento lanzado, pero golpeó la pared con el neumático trasero izquierdo en la última curva y su tiempo no fue bueno.
Franco mejoró en seis décimas su tiempo entre prácticas (había marcado 1m19s331), pero quedó a 1s329 de Max Verstappen, el líder. Gasly, quien no giró en la primera tanda porque le cedió su butaca a Paul Aron, marcó 1m19s194 y quedó a 473 milésimas del bonaerense en el último puesto. El francés se quejó por el andar de su auto: "Fue la peor sesión del año. No puedo frenar, no puedo girar, me estoy deslizando por todos lados, así que tendremos que revisar bien el auto esta noche", dijo.
El piloto argentino también fue claro con el coche 43 y lo calificó como inmanejable. Y así seguirá hasta el final de la temporada, no habrá mejoras y los inconvenientes son crónicos. Sin dudas, lo mejor que puede esperar Colapinto de acá al cierre del 2025 es la confirmación como compañero del francés para la temporada 2026. Todos los caminos conducen a que eso ocurrirá antes del GP de San Pablo. Deportivamente, poco podrá sacar del A525, el auto más débil de la categoría y que le dio un baño de realidad más a Franco en Ciudad de México.
