Si bien en un principio se había anunciado que el nombre se daría a conocer después del GP de la Ciudad de México, desde la escudería de las bebidas energizantes avisaron ahora que no hay apuro.
Por estos días, la pregunta del millón en Fórmula 1 es: ¿quién será el campeón del mundo? Ahora, la del medio millón, entonces, es: ¿quién será el compañero de Max Verstappen en 2026? Terminada la novela del coqueteo del neerlandés con Toto Wolff y Mercedes y con su continuidad en Red Bull ya asegurada, ahora resta saber quién estará en el otro auto de la escudería austríaca. Y el dato no es menor porque se trata de una butaca que tuvo dos pilotos este año después de que cesantearan a Checo Pérez: Liam Lawson y Yuki Tsunoda.
El neozelandés duró un suspiro: apenas dos carreras, antes de ser degradado a su puesto nuevamente dentro de Racing Bulls. Desde entonces, el lugar lo ocupa el japonés, quien en 16 fines de semana de competencia anotó 25 puntos contra los 270 que acumuló la gran estrella del team de las bebidas energizantes. Su llegada, solventada por el aporte de Honda, no cambió el rumbo de una butaca que cuesta llevar. Entonces, ¿quién estará en 2026?
Helmut Marko, el asesor deportivo y hombre fuerte en Red Bull, perdió la paciencia con el bueno de Yuki y no ocultó su malestar por la falta de resultados. Sin embargo, el nipón cuenta con el apoyo de Laurent Mekies, quien asumió el cargo de director desde el GP de Bélgica proveniente de Racing Bulls, donde tenía a Tsunoda como uno de sus pupilos. El entuerto crece, porque mientras Marko había dicho que tras el fin de semana mexicano se daría la sentencia sobre el compañero de Max, en el Hermanos Rodríguez el pope francés dio otra versión.
“Queremos darle a Yuki y a todos nuestros demás pilotos todo el tiempo posible. Sé que ya hemos dicho que quizá decidiríamos después de México, pero la verdad es que no hay necesidad de apresurarnos. Yuki hizo una muy buena carrera en Austin. Nos tomaremos nuestro tiempo y, cuando sintamos que estamos listos, lo haremos. No hay prisa”, avisó Mekies.
La casa de las bebidas energizantes tiene cuatro butacas y dos pilotos confirmados para 2026: Max Verstappen e Isack Hadjar. El caso del francés es diferente porque todavía no se sabe con qué equipo correrá. De hecho, su nombre fue el que más boletos sacó para ser el compañero del tetracampeón. Eso sí, el parisino quiere evitar hablar del tema, es más, no quiere escuchar más nada.
“En realidad, me gustaría saberlo al final del año porque el ruido que se genera es más molesto que cualquier otra cosa. Hace 12 meses tenía algunas dudas. Es cierto. Tenía una idea, pero lo cierto es que este año estoy en mejor posición. Sé que estaré en la Fórmula 1 el año que viene. Así que estoy mucho menos nervioso. Sin duda lo sabré antes de que se anuncie. Si no, habría un problema. En un mundo ideal, me gustaría que todos esperaran hasta fin de año antes de hacerme preguntas”, dijo el piloto de Racing Bulls.
Con dos que se sabe que seguirán en la familia austríaca, queda conocer el futuro de Yuki y de Lawson. Detrás viene pidiendo pista Arvid Lindblad, la gema que el programa de desarrollo manejado por Mako viene puliendo desde hace rato. El inglés giró con gran ritmo en la primera práctica libre de México y su salto a F1 parece estar descontado para 2026.
En ese juego, existe la chance de formar Red Bull con Verstappen-Hadjar y Racing Bulls con Yuki o Liam y Linblad. Y si finalmente Tsunoda mantiene su butaca en el team principal (parece la alternativa más difícil), la cabeza que rodaría sería la de Lawson, para formar la dupla Hadjar-Lindblad en el equipo de Faenza.
Solo quedan cuatro butacas sin dueño confirmado para 2026. Las dos de Racing Bulls, un Red Bull y el compañero de Pierre Gasly en Alpine. En el caso del la escudería de Enstone, todos los caminos conducen a la continuidad de Franco Colapinto, anuncio que llegaría antes de la carrera de Brasil.
