El australiano recibió diez segundos de recargo tras un toque a Kimi Antonelli en la primera curva y sus chances de ser campeón quedaron muy complicadas.
El duelo puertas adentro de McLaren tomó un rumbo que no se tuerce: Lando Norris. En las últimas seis carreras, Oscar Piastri, quien llegó a disfrutar de una ventaja de 34 puntos después de su triunfo en Países Bajos (15ª cita), anotó apenas 57 unidades. El inglés, por su parte, sumó 115 en el mismo sexteto de Grandes Premios. El australiano volvió a ser quinto en la carrera principal del GP de San Pablo (21ª cita), posición en la que finalizó en las tres últimas competencias.
En Interlagos, Piastri falló en momentos cruciales. En el sprint pasó por arriba del piano interno en la salida de la S de Senna, que tenía agua, y terminó contra el muro. En la competencia principal de este domingo, se tiró por adentro en el relanzamiento tras el auto de seguridad, y trató de pasar a Kimi Antonelli, quien se defendió sin ceder un centímetro. El piloto de McLaren, bloqueado, impactó contra el italiano de Mercedes, quien a su vez eliminó de carrera a Charles Leclerc. Los diez segundos de penalización que recibió Piastri hipotecaron sus chances en la competencia y, prácticamente, en el torneo.
El piloto de Melbourne llegó al corralito de prensa y, como siempre, no mostró sensaciones en sus gestos. Está siempre igual, cuando gana y cuando pierde. Lógicamente, se refirió a la sanción que recibió por el toque a Antonelli: “Tuve una oportunidad muy clara y la aproveché, los otros dos pilotos (por Antonelli Leclerc) frenaron bastante tarde. Obviamente hubo una pequeña refriega en la curva, pero eso se debió a que vi que Kimi no me iba a dar ningún espacio. No podía simplemente desaparecer de ahí. Pero la decisión de los comisarios es la que fue”, dijo Piastri.
En cuanto a sus chances en el campeonato, ahora 24 puntos por detrás de Norris, señaló: “Intentaré sacar el máximo provecho posible a las carreras que quedan. Hoy (por la carrera de San Pablo), más allá de la penalización, el ritmo no estaba donde yo quiero que esté. La segunda mitad de la carrera no estuvo mal, pero en la primera fue difícil. Estoy intentando controlar la situación y tener mejores fines de semana”.
