<
>

Tevin Coleman fue el mejor jugador de la Semana 8 en la NFL

La octava jornada se la llevaron, en número, los pasadores, pero fue un polivalente corredor el que salió con el codiciado nombramiento de Coloso de la Semana 8:


TEVIN COLEMAN, RB, SAN FRANCISCO 49ERS

No es la primera vez que lo señalo, pero cómo ha sido eficiente el juego terrestre de los Niners en el año, uno que además tiene el mérito de no depende solamente de una persona.

Esta tarde frente a los Carolina Panthers, y con un monstruo de las estadísticas como es Christian McCaffrey enfrente, fue el turno de Coleman de brillar intensamente.

Con 105 yardas y tres touchdowns en tan solo 11 acarreos, Coleman empleó a la defensiva de Carolina como su pista de slalom personal. A eso hay que agregarle un cuarto touchdown en una de sus dos atrapadas del juego.

Para ser justos, todo el equipo de San Francisco fue dominante. La defensiva humilló de mala manera a Kyle Allen, y el resto de los corredores de los Niners también hizo un buen trabajo de encontrar yardas importantes, sobre todo Raheem Mostert. Pero la tarde se la llevó Coleman, quien no pudo contribuir de inmediato en su primera campaña en San Francisco por problemas físicos.

Todavía no está completo el backfield de los 49ers: falta que se integre Jerick McKinnon. No obstante, el grupo que han conformado Coleman, Mostert, Jeff Wilson Jr., y Matt Breida es la mejor --en lo colectivo-- en la liga este año.


MENCIONES HONORÍFICAS

Derek Carr, QB, Oakland Raiders. Esta vez, fue el juego aéreo el que cargó a los Raiders en la jornada, aunque lastimosamente no fue suficiente para quedarse con el triunfo. Carr completó 18 de sus 30 intentos de pase para 285 yardas y tres touchdowns sin intercepción, destacando la química que ha desarrollado con Tyrell Williams hasta el momento.

Mike Evans, WR, Tampa Bay Buccaneers. Por momentos, parece que los Bucs están buscando perder a propósito. Eso sí, no podemos asignarle culpa a Evans. El receptor abierto atrapó 11 pases para 198 yardas y dos touchdowns en la tarde para Tampa Bay, que de todos modos terminó cayendo ante los Titans por 27-23, gracias a que no han aprendido a valorar la posesión del balón.

Kenny Golladay, WR, Detroit Lions. El partido entre Giants y Lions terminó siendo más entretenido de lo que lucía sobre el papel, y hubo circo aéreo a ambos lados. Golladay fue uno de los protagonistas principales, con seis recepciones para 123 yardas y dos touchdowns en la tarde, convirtiéndose en factor para que Detroit pudiera imponerse con cierta comodidad, por 31-26, a los Giants.

Daniel Jones, QB, New York Giants. Sí, el novato perdió un balón suelto que incidió directamente en el marcador, pero también hizo mucho por lavar su error, completando 28 de 41 intentos de pase para 322 yardas y cuatro touchdowns, sin intercepciones, en un nuevo tropiezo neoyorquino.

Cooper Kupp, WR, Los Angeles Rams. Los Rams requerían de una chispa para devolverle un poco de vida a una temporada que se ha visto nublada por la resaca de Super Bowl, y es posible que Kupp la haya aportado en Wembley Stadium. Con una actuación de siete recepciones para 220 yardas --la mayor cantidad para un juego en Londres--, Kupp le inyectó energía a un ataque angelino que no ha lucido igual al que tomó a la liga por sorpresa el año pasado. La victoria por 24-10 sobre los Cincinnati Bengals en el Viejo Continente le pone sabor a la carrera por la NFC Oeste, por más que los Niners sigan invictos.

Gardner Minshew II, QB, Jacksonville Jaguars. Reapareció la magia de Minshew en una tarde en Jacksonville en el que mucho del ambiente giró en torno a los fantasmas, aunque no precisamente fue debido a Halloween. el quarterback novato de los Jags completó 22 de 34 envíos para 279 yardas con tres touchdowns sin intercepciones, y agregó 28 yardas terrestres en ocho acarreos, para que Jacksonville humillara a los New York Jets, por 29-15, al ritmo de la música de "Ghostbusters".

David Montgomery, RB, Chicago Bears. Los jugadores de fantasy football pedían a gritos que se le diera una oportunidad a Montgomery de llevar la responsabilidad del juego terrestre de Chicago y, por fin, el head coach Matt Nagy, se dio el valor de hacerlo. El novato acarreó el balón 27 veces para 135 yardas por tierra --la mayor cantidad en la jornada--, anotando un touchdown para unos Bears que, sin embargo, no lograron evitar el tropiezo dramático por 17-16 ante Los Angeles Chargers.

Latavius Murray, RB, New Orleans Saints. Vaya trabajo que hizo Teddy Bridgewater en sustitución de Drew Brees, y vaya trabajo que ha realizado Murray en sustitución de Alvin Kamara en la ofensiva de New Orleans. En el regreso de Brees a la titularidad, Murray corrió 21 veces el balón para 102 yardas con un touchdown en la victoria por paliza de los Saints a los Arizona Cardinals, por 31-9, en el Superdome. Ahí no quedó todo. También atrapó nueve pases para 55 yardas y un touchdown por aire, en una de sus actuaciones más completas en la memoria reciente, y una semana después de anotar, también, dos touchdowns.

Aaron Rodgers, QB, Green Bay Packers. No obtuvimos el tiroteo de pistoleros que deseábamos en la visita de Green Bay a Kansas City, pero el pasador de los Packers no decepcionó. Completando 23 de 33 envíos para 305 yardas con tres touchdowns sin intercepciones, Rodgers condujo a su equipo a la victoria en Arrowhead, por 31-24, para mantener a los Packers en la conversación por el mejor equipo de la Nacional.

Ryan Tannehill, QB, Tennessee Titans. ¿Cuán confiable es Tannehill en Nashville? No mucho, a mis ojos, pero al menos el pasador de noveno año cumplió con uno de sus mejores partidos como profesional esta tarde en Nissan Stadium. Fueron 21 pases completos de 33 intentos para 193 yardas y tres touchdowns sin intercepciones en la tarde para Tannehill, quien al menos le brindó una muestra al pasador de enfrente sobre cómo hay que proteger el ovoide.

Deshaun Watson, QB, Houston Texans. Patrick Mahomes se lleva todos los reflectores cuando se trata de charlar sobre los quarterbacks del Draft 2017, pero quizás Watson está más cerca de lo que quisieran aceptar algunos. Esta tarde, Watson se enfrascó en un duelo de pistoleros con Carr en el que sacó la mejor parte, gracias a 27 de 39 completos para 279 yardas con tres pases de anotación sin intercepción. A eso hay que sumarle 46 yardas en 10 acarreos. El tercer pase de anotación del día para Watson, segundo para Darren Fells, fue un acto de magia en el que se quitó a dos defensivos, giró, y lanzó prácticamente a ciegas después de recibir un zapatazo al ojo, para asegurar una victoria de 27-24.