ALAMEDA -- Charles Woodson había atravesado al humillante experiencia de la agencia libre en dos ocasiones anteriores, una antes de la campaña del 2005 y otra vez después de la temporada del 2012.
Esta vez, sin embargo, fue distinto para el veterano de los Oakland Raiders, quien está por comenzar su decimo séptima temporada.
"Se tardó un poco más de lo que deseaba en el receso de temporada", admitió Woodson la semana pasada al inicio de las segundas actividades organizadas del equipo. "Quería amarrar algo de inmediato, pero por supuesto, todos los equipos tienen sus prioridades, y respeto lo que hicieron en la temporada baja y las movidas que hicieron antes de contratarme de nuevo.
"Me estaba poniendo un poco nervioso de estar en casa tratando de descifrar lo que sucedía, porque la realidad es, si no hubiera sucedido aquí, podría haber sido el fin".
Es decir, que si los Raiders no le hubieran ofrecido un contrato que le convenciera, su carrera de calibre del Salón de la Fama se "podría" haber terminado. Especialmente después de que nadie más le había contactado.
En lugar de eso, el 21 de marzo firmó un convenio que se reportó por un año y 2.5 millones de dólares para regresar en el primer año de la más reciente reconstrucción de los Raiders.
"Estamos emocionados por contar de nuevo con 'Wood'", dijo el entrenador en jefe de los Raiders, Dennis Allen. "Pienso que aporta mucho a la mesa. Creo que después de tenerlo por un año, tenemos una mejor idea de lo que tenemos, de lo que puede hacer muy bien para nosotros, y cómo podemos ponerlo en posición de hacer jugadas".
Woodson, quien cumple 38 años de edad el 7 de octubre, hizo la transición a profundo libre la temporada pasada y jugó un calendario completo de 16 encuentros por primera vez desde el 2010, cuando era el Jugador Defensivo del Año reinante en la NFL como miembro de los Green Bay Packers.
En el 2013, tuvo una intercepción, dos capturas tres balones sueltos forzados y un par de balones sueltos recuperados, incluyendo uno devuelto 25 yardas para anotación en contra de los San Diego Chargers el pasado 6 de octubre. Fue su touchdown defensivo Nº 13 de su carrera, empatándolo con Rod Woodson y Darren Sharper por la mayor cantidad en la historia de la NFL.
Y con todo y todo, a finales de noviembre, con Oakland en medio de una racha de seis derrotas consecutivas, Woodson empezó a hablar de los Raiders del 2014 usando "ellos", como si se estuviera distanciando de la franquicia. Woodson se echó hacia atrás al final de la campaña, declarando su deseo de regresar.
Pero primero, como notó él mismo, los Raiders salieron de compras en la agencia libre, firmando a jugadores del calibre de Justin Tuck, LaMarr Woodley, Antonio Smith y Tarell Brown al lado defensivo del balón antes de voltear su atención hacia Woodson.
"Traer a tipos como Tuck, traer a tipos como Woodley, son los que saben cómo ganar y cómo jugar al fútbol americano", declaró Woodson.
"Ellos han ganado. Ellos han ganado en esta liga y han ganado el grande. Contar con jugadores así, tienes a líderes en el equipo a quienes pueden seguir los demás, y eso será importante para nosotros, así que me siento muy bien por ello".
Woodson, quien jugó un Super Bowl con los Raiders en el 2003, ganó un anillo con los Packers en el 2011 y está dispuesto a seguir jugando más allá de la siguiente campaña, recibió una pregunta respecto al techo que ve para Oakland en el 2014.
"No existe un techo; estamos tratando de atravesar el techo", respondió el back defensivo. "Observo al equipo y siento que tenemos lo que necesitamos desde un punto de vista del equipo para llegar hasta allí.
"Ahora, ¿eso sucede? Nadie lo sabe hasta que llegue el momento. Pero contamos con los jugadores. Y si todos nos enfocamos, todas nuestras metas para el final de la campaña estarán allí".