Cuando el encuentro marchaba favorable para Medvedev, el italiano sorprendió con una declaración que captaron las cámaras.
En un momento decisivo de la final ante el ruso Daniil Medvedev (3°) en el Abierto de Australia, el tenista italiano Jannik Sinner (4°) manifestó explíctitamente su cansancio hacia su equipo de trabajo, que auguraba el peor desenlance, pese a que después sacaría su fuego interior, remontaría increíblemente y estrenaría su vitrina con trofeos Grand Slam.
Tras desperdicir un 40-30 con su servicio, en el 4-4 del tercer set, punto que envió afuera con un derechazo cruzado, el dueño de 10 títulos ATP no ocultó su merma física al mirar atentamente a sus entrenadores en un rincón, expresarles "estoy muerto" sin rodeos y secarse con la toalla, mientras aprovechaba para recuperar aire.
No obstante, el diestro, de 22 años y 188 centímetros de estatura, se recuperaría favorablemente del agotamiento, desempeñando el tenis total que le había garantizando un boleto en el juego definitorio, instancia en que se presentaba como máximo favorito, para firmar un 3-6, 3-6, 6-4, 6-4 y 6-3 en tres horas y 44 minutos de batalla.