Jannik Sinner es una máquina prácticamente perfecta y, si no hubiese sido por un supremo Carlos Alcaraz no solo miraría a todos desde la cima del ranking mundial sino que, además, hubiese doblado la cantidad de títulos que obtuvo a lo lrgo de 2025.
Uno de los que se dio cuenta de ello y ponderó su rendimiento durante las interminables 52 semanas de la temporada fue Francisco Cerúndolo que habló con Tennis 365 durante su estadía en Londres por las Finales de la UTS: “Jugué contra él en Roma este año y fue un partido muy disputado. Era su primer torneo tras su suspensión, y tuve un poco más de tiempo para pensar en la cancha e intentar crear algo. Luego me enfrenté a él en París, en una cancha dura cubierta, y fue imbatible. Estaba jugando bien, pero perdí el primer set 7-5 y luego el segundo 6-1. Sinceramente, sentí que estaba jugando bien, pero al final solo gané un juego en el set".
¿E qué se destaca particularmente? "Siempre está ahí: su saque es fantástico, su devolución es increíble, y luego, desde la línea de fondo, golpea la pelota muy fuerte y no tienes tiempo. No sabía qué hacer en París”, no le encontró puntos bajos el argentino.
Y fue mucho más allá en el tiempo: "En 2023 era el número 5 o 6 del mundo y ahora, obviamente, es el número 1 o 2, así que es muy diferente. Ha mejorado mucho. Hace dos años, quizá no estaba tan en forma físicamente y si jugabas partidos y puntos largos, fallaba algunas bolas. Ahora no falla nada".
Entonces, ¿Cómo se le gana al cuatro veces ganador de Grand Slam? "...no tengo ni idea. Solo tengo que entrenar para la próxima temporada e intentar estar listo. Para ganarle tengo que jugar perfecto y él tendría que jugar un poco mal", explicó el mejor argentino rankeado.
