Lorenzo Musetti, le ganó un mano a mano a Jannik Sinner: el de Deportista del Año en los Premios Gazzetta Sports.
En ese contexto, hizo un balance sobre su año, para el medio que lo galardonó: "Ha sido una temporada realmente maravillosa, con muchos estrenos: quedé entre los diez mejores, llegué a mi primera final en Montecarlo y clasifiqué para las Finals por primera vez. Llevo mucho tiempo buscando este salto de madurez".
A principios de 2024 se sentía un poco perdido con repetidas derrotas y u nivel inestable. En ese momento algo cambió. Y, al pisar Roland Garros se sintió con chances de bajar a Novak Djokovic en tercera ronda. Luego alcanzó la final en Queen's, la semifinal en Wimbledon, la final en Umag y la medalla de bronce olímpica en París.
Pero también se animó a responder sobre la gran rivalidad del circuito: "Estoy trabajando para superar esta brecha con Sinner y Alcaraz. Los enfrenté a ambos este año y me ayudó a entender dónde puedo mejorar. Por eso he incorporado a mi equipo al entrenador Perlas, quien trabajará junto a Tartarini. Espero que esto me lleve a un salto definitivo de calidad".
Comenzó el 2025 en el puesto 17° ATP y fue una de las estrellas absolutas de la temporada de polvo de ladrillo: final en Monte-Carlo, semifinal en Madrid, semifinal en Roma y semifinal en Roland Garros, donde jugó a la par con Alcaraz durante dos sets antes de rendirse por lesión.
En su superficie favorita, Musetti quedó segundo, solo superado por el español, superando, entre otros, a un Alexander Zverev, Alex de Miñaur, Holger Rune y tantos más. La carrera hacia Turín comenzó fuerte en septiembre. Las finales en Chengdu y Atenas y la semifinal en Viena le permitieron mantenerse en el tren del torneo final del año. Gracias al retiro de Djokovic se le abrieron las puertas. Y solo él sabrá mantenerla abierta de cara a la temporada que se aproxima.