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Justin Verlander culpa a 'un mal slider', no al corto descanso, por desempeño en Juego 4

ST. PETERSBURG, Fla. -- AJ Hinch le pidió a Justin Verlander hacer algo que nunca había hecho antes y quizá pase un buen rato para que se lo vuelva a pedir.

No es que el manager de los Houston Astros esté arrepentido.

Verlander duró sólo tres entradas y dos tercios en el Juego 4 de la Serie Divisional de la Liga Americana ante los Tampa Bay Rays el pasado martes, luego de permitir cuatro carreras, tres en la primera entrada, y siete hits, incluidos dos jonrones.

Los Astros perdían 4-0 cuando Verlander dejó el juego tras dar base por bolas a Ji-Man Choi en la cuarta entrada, para deleite de la afición que llenó el Tropicana Field y vio al as de los Astros hacer 84 lanzamientos. Los Rays atacaron a Verlander desde el inicio en el Juego 4. Tommy Pham, segundo en el orden de Tampa Bay, le conectó un jonrón al jardín izquierdo para abrir la pizarra. Los Rays sumaron dos carreras más en ese primer episodio y Verlander necesitó 32 lanzamientos para escapar. De acuerdo a ESPN Stats & Information, ese es el total de pitcheos más alto en un primer inning para Verlander desde que se unió a los Astros en 2017.

“Un mal slider. Control inconsistente”, señaló Verlander. “Sentí que la velocidad estaba allí, pero el control no y el slider tampoco. Mezclen eso con una buena actitud (de los Rays) en la primera entrada”.

En el último episodio que trabajó, Verlander permitió ùn jonrón solitario a Willy Adames con un slider que rompió justo a la mitad del plato y a la altura de la cintura. El pasaporte a Choi fue un final adecuado para uan salida en que Verlander batalló para ubicar sus lanzamientos.

Verlander hizo strikes en sólo la mitad de las 50 rectas que lanzó, de acuerdo a datos de Statcast.

Con su recta fuera de la zona de strike, los Rays se regodearon con los cambios de Verlander al batear de 12-6 ante los lanzamientos de velocidad menor de Verlander, con dos cuadrangulares, dos dobles y siete hits.

Sin embargo, pese a las fallas, Verlander rápidamente negó señalar a su breve descanso como una excusa por su actuación.

“No sabía qué esperar. En realidad no esperaba nada. Esperaba que (mi salida) fuera normal”, dijo Verlander. “Lo más fácil es decir que fue el corto descanso, pero, no lo creo. Me sentí bien físicamente. Simplemente no ejecuté como o necesitaba.

“Realmente el slider fue el peor que he tenido todo el año (…). Cuando cometí errores, (los Rays) los capitalizaron con hombres en base. Eso nos mató”, agregó.

El manager de los Rays, Kevin Cash, consideró que el verdadero factor para el rápido cambio de su equipo tras su último encuentro con Verlander fue la familiaridad más que el estado físico del pitcher.

“La familiaridad ayuda. (Justin) aún es el mejor. Nadie lo niega, pero cuatro o cinco días después, algunos de esos pitcheos quizá se repitan un poco y pudimos tener algunos turnos de calidad y golpear duro a la pelota”, señaló el piloto.

“Obviamente, no es la forma en que queríamos que sucedieran las cosas. Apesta”, dijo Verlander.

Los Rays ganaron el partido 4-1 para forzar al quinto y decisivo el viernes en el Minute Maid Park en Houston.

Con la ventaja de los Astros reducida a 2-1 en la serie de cara al Juego 4, Hinch designó a Berlander, de 36 años, para abrir, luego de que Houstin cayó 10-3 en el Juego 3 el lunes. Eso significó que Verlander subiera a la loma con sólo tres días de descanso, algo que nunca había hecho luego de trabajar un buen tramo en su salida anterior durante su ilustre carrera.

Verlander lanzó siete entradas en blanco ante los Rays en el Juego 1 el viernes pasado en Houston.

“En la Postemporada, uno le pide a alguien hacer algo que no es normal, es algo que provoca muchos nervios, pero, (Justin) se sentía grandioso e hizo muy buenos lanzamientos (en el Juego 4) y provocó muchos swings y fallas”, dijo Hinch.

Si el breve descanso tuvo que ver con la mala noche de Verlander, los Astros aún tienen un par de cosas a su favor: a la afición que los apoyará en Houston y la presencia en el Juego 5 del abridor Gerrit Cole, quien no ha perdido desde el 22 de mayo en una racha de salidas que llegó a 23 en el Juego 2 ante Rays.

“Es bueno”, dijo el venezolano segunda base de los Astros, Jose Altuve, sobre tener a Cole arriba de la loma en el Juego 5. “También fue bueno tener a Justin como abridor. Si tuviera que repetir todo, volvería a poner a Justin, porque es nuestro pitcher junto con Gerrit. Así jugamos. Vamos a ir a casa, a tener a Gerrit en la loma y haremos todo lo posible por ganar”.