Naoya Inoue retuvo sus títulos indiscutibles de peso supergallo tras un triunfo unánime por puntos ante Murodjon Akhmadaliev
Naoya Inoue defendió con éxito sus títulos indiscutibles de peso supergallo con una contundente victoria unánime por puntos, el domingo, sobre Murodjon Akhmadaliev en Nagoya, Japón.
Dos jueces anotaron la pelea 118-110, mientras que uno 117-111, todos a favor de Inoue.
Tras la victoria, Inoue, de 32 años, confirmó que volverá a pelear en diciembre en Riad, Arabia Saudita. Se espera que Inoue se enfrente al invicto mexicano David Picasso el 27 de diciembre.
En la quinta defensa de sus títulos del CMB, AMB, OMB, FIB y Ring, Inoue (31-0, 27 KOs) ofreció otra actuación impecable, derribando sistemáticamente a Akhmadaliev (14-2, 11 KOs).
Akhmadaliev llevaba tiempo pidiendo una pelea contra el boxeador número 2 libra por libra de ESPN, pero se quedó corto ante 'El Monstruo'.
Inoue se preparó con su potente y rápido jab de izquierda, limitando el ataque de Akhmadaliev y tomando el control de la pelea desde los primeros intercambios.
Si bien Akhmadaliev tuvo cierto éxito en ocasiones, Inoue respondió con veneno y tuvo la última palabra en sus intercambios la mayoría de las veces.
Una vez que encontró el ritmo de la pelea, el juego de pies de Inoue se hizo evidente, bailando alrededor de Akhmadaliev y acribillándolo con jabs entre cada round. Inoue apuntó a la cabeza y al cuerpo por igual, causando daño gradualmente y desgastando a su oponente.
Akhmadaliev intentó desatar su potente derecha durante todo el combate y, aunque conectó en un par de ocasiones, Inoue siempre encontraba la manera de evadir el poder del uzbeko.
Para el octavo asalto, Akhmadaliev se sentía frustrado por no poder imponer su poder a su oponente.
Inoue se acercaba rápidamente, conectaba una combinación potente y se alejaba en un abrir y cerrar de ojos. Su velocidad y precisión eran simplemente abrumadoras.
La hinchazón alrededor del rostro de Akhmadaliev también se hizo visible en los asaltos finales, mientras que Inoue parecía prácticamente ileso. En ocasiones, incluso le pedía a su oponente que entrara en combate.
Akhmadaliev conectó un derechazo limpio en los tramos finales del duodécimo asalto, pero su mejor golpe llegó demasiado tarde, mientras que el invicto de Inoue se extendió con relativa facilidad.
En la cartelera preliminar, Christian Medina noqueó a Yoshiki Takei para alzarse con el título mundial de peso gallo de la OMB.
Medina (26-4, 19 KOs) tuvo un comienzo soberbio, derribando a Takei (11-1, 9 KOs) con un potente derechazo en el primer asalto. La confianza del mexicano no hizo más que crecer y dominó a partir de entonces.
La pelea terminó en el cuarto asalto después de que Medina arrinconara a Takei y le conectara una serie de salvajes uppercuts, obligando al árbitro Ramón Peña a intervenir y detener la pelea.