FRISCO, TX --Fue una entretenida noche de peleas en el Ford Center el sábado por la noche. Mikey García volvió a sus formas ganadoras al derrotar a Jessie Vargas, pero no hizo la declaración enfática que él había esperado. De hecho, dejó tantas preguntas sobre sí mismo como peso welter como las que respondió.
Román "Chocolatito" González, que ya era un seguro Salón de la Fama del Boxeo, hizo retroceder el reloj esta noche y se robó el espectáculo. Entonces, ¿qué sigue para los jugadores clave en la cartelera del sábado por la noche? Dan Rafael y Steve Kim se reportan desde Texas para dar sus reacciones instantáneas.
¿García demostró que puede competir con los mejores pesos welter de la división?
Kim: Si bien derrotó a Jessie Vargas, tienes la sensación de que García es un tipo que debería estar en 140. Si bien sigue siendo uno de los luchadores más fundamentales en el deporte, carece de esa capacidad para atravesar realmente los pesos welter de buena fe. Vargas es un tipo sólido, probablemente alguien más consideraría un peso welter en el top 10. Solo Tim Bradley y Manny Pacquiao lo habían derrotado, por lo que es un boxeador con credenciales sólidas.
Pero había algo que faltaba en García, tal vez sea el siguiente paso o la patada final. Pero en una noche en la que queríamos que García hiciera una declaración y realmente marcara su llegada como un peso welter, en cambio, salimos un poco decepcionados. No vimos a un tipo que realmente pudiera competir con personas como Errol Spence Jr. (que lo dejó en blanco el año pasado), Terence Crawford o Pacquiao.
No lo dudes: García es uno de los mejores boxeadores del mundo. Pero las clases de peso son importantes. En el peso welter es bueno, pero está lejos de ser élite.
Rafael: Vargas es un luchador de calidad y un buen peso welter, pero no lo veo como un luchador de élite en la división. Por lo tanto, aunque García superó a Vargas sin demasiados problemas, queda por ver cómo lo haría contra los mejores de los mejores, como Crawford o Pacquiao. Recuerde, cuando peleó contra un peso welter de élite en marzo pasado, fue mayoreado por el titular Errol Spence Jr., que está un nivel por encima de Vargas.
¿A quién te gustaría que García se enfrentara después?
Rafael: García ha querido enfrentar a Pacquiao por bastante tiempo, y esa sería una pelea divertida e interesante. No creo que esté fuera de discusión que podría ser lo próximo para García y suceder este verano. Es una pelea que Pacquiao ha dicho que consideraría, y ahora que García ha logrado una sólida victoria en la división, ¿por qué no? Pacquiao frente a García es una defensa del título muy razonable para el Pacman. Dicho esto, convertiría a García en el no favorito contra Pacquiao, así como contra el titular Crawford y otros 147 libras como los ex titulares Shawn Porter, Danny García o Keith Thurman.
Kim: OK, de ese grupo, digo Pacquiao por una razón muy simple: Pacquiao, a pesar de su larga e histórica historia en el peso welter, es un tipo que durante años ha luchado por encima de su peso más natural. Solo mirando su marco, es para todos los efectos un peso welter junior que no se molesta con cortar peso como lo hacen muchos otros boxeadores.
Esa es probablemente la mejor opción, y la más lucrativa, para García, cuyo estilo de contragolpe calculador, que recuerda mucho al gran Juan Manuel Márquez, podría molestar a Pacquiao. Y a diferencia de los otros nombres mencionados, no estaría abrumado físicamente por el legendario pugilista filipino.
Las habilidades de García lo mantendrían absolutamente en la pelea contra Thurman y Porter, pero uno se pregunta si se desgastaría por su tamaño y físico en la segunda mitad de estas peleas. Crawford es solo un enfrentamiento de mal estilo para él, punto, y ya vimos lo que sucedió con Spence en 2019.
¿Hay alguna posibilidad de que todavía haya un futuro para García en las divisiones inferiores?
Rafael: El tiempo de García en las 135 libras casi seguramente está terminado. No ha boxeado en peso ligero desde que unificó los títulos mundiales contra Robert Easter Jr. en julio de 2018. Pero García aún puede hacer las 140 libras, y ha dicho que volvería al peso welter junior para la pelea correcta, ganara o perdiera contra Vargas. Debido a que García no está atado a un promotor -que no sea el emparejamiento de Matchroom Boxing en su próxima pelea-, podría elegir la mejor pelea para él.
¿A dónde va Vargas desde aquí?
Kim: Vargas, quien obtuvo la victoria moral al completar la pelea el sábado por la noche, sigue siendo un luchador muy útil entre 147 y 154. Solo ha perdido ante la élite del deporte y, en general, hace grandes esfuerzos.
En esta coyuntura, puede que ya no sea uno de los 10 mejores pesos welter, sino que es alguien que está al margen de esa lista y que aún lleva un nombre muy reconocible. Ha estado en la televisión durante años y capturó un par de cinturones de título mundial en peso welter junior y peso welter, por lo que todavía habrá algún tipo de demanda de Vargas como lado B para algunos de los nombres más importantes del deporte.
Además, dado el hecho de que se ha sumergido s un peso mediano junior, Vargas tiene cierta flexibilidad en cuanto a las oportunidades que se le presentan.
Justo en la parte superior de mi cabeza, un tipo como Vergil Ortiz Jr., que es un prospecto muy respetado manejado por Golden Boy Promotions, sería un oponente contra el que muchos fanáticos desearían ver a Vargas. ¿Cuán listo está Ortiz para el gran momento? ¿O qué tal un tipo como "The Mean Machine" Egidijus Kavaliauskas, en lo que sería una batalla muy entretenida en la que el ganador volvería a la mezcla en la división?
Si Vargas decide ascender, una pelea que se discutió hace unos años mientras ambos eran pesos welter que sería intrigante es una conexión con Kell Brook, quien ahora está haciendo campaña en el peso mediano junior. Esa pelea en realidad podría proporcionar muchos fuegos artificiales, dados los dos estilos.
Rafael: Antes de que Vargas aceptara la pelea con García, se dirigía a la división de peso mediano junior. Su pelea anterior fue de 150 libras, una victoria por nocaut sobre Humberto Soto. Ahora que ha perdido ante García, puedo verlo subir de peso para alcanzar su objetivo de eventualmente ganar títulos en cuatro divisiones. En el peso mediano junior, tal vez podría encontrarse en una pelea eventual con cualquiera de los 154 kilos promovidos por Eddie Hearn de Matchroom Boxing, como Brook o Liam Smith, aunque ellos pueden pelear entre sí a continuación.
¿Puede Román González ser la fuerza que una vez fue? ¿Qué sigue para él?
Rafael: Tiene 32 años y no había ganado una pelea significativa en unos años, pero González se veía increíble contra un buen titular en Kal Yafai. Lo derribó, lo golpeó y lo noqueó de manera espectacular en el noveno asalto. No podría haber sido un mejor rendimiento. Era el viejo Chocolatito. Definitivamente puede pelear con cualquiera de los mejores boxeadores de la división. Sin embargo, ¿volverá a ser el rey libra por libra? Lo dudo, pero es uno de los mejores peleadores pequeños de todos los tiempos e irá al Salón Internacional de la Fama del Boxeo cuando se retire. En la primera bolete.
González dijo que quiere unificar títulos, y la pelea obvia es una revancha muy factible con Juan Francisco Estrada, a quien González superó para retener su título de peso paja hace varios años en un combate excepcional.
Kim: ¿Realmente alguna vez fue a alguna parte? Sí, muchos expertos descartaron a González después de las derrotas consecutivas ante Srisaket Sor Rungvisai en 2017. Pero resulta que, como Mark Twain, los rumores sobre la desaparición de Chocolatito fueron muy exagerados. Después de tomarse más de un año de descanso entre septiembre de 2018 y diciembre de 2019, demostró que todavía le queda algo en el tanque.
No, él no es el tipo que una vez fue, pero demostró el sábado por la noche que todavía es un luchador formidable, uno que aún no está listo para cabalgar hacia el atardecer. El descanso prolongado no solo lo sanó físicamente, sino que pareció limpiarlo mentalmente. Cuando lo viste entrenar en Palm Springs bajo la dirección de Marcos Caballero, viste un luchador que todavía estaba muy comprometido con su oficio, y más allá de eso, físicamente en forma. Los días en que Chocolatito luchaba por hacer el peso la semana de una pelea parecían haber terminado. Ahora se da cuenta de que, para detener el padre tiempo, el boxeo debe ser más un compromiso durante todo el año.
Y esta disciplina recién descubierta ayudó al futuro miembro del Salón de la Fama a retroceder el reloj esta noche. ¿Qué es lo siguiente?
Chocolatito ya tiene una vitrina de trofeos llena de cinturones de campeonato, desde peso paja hasta gallo junior, y ha dejado en claro que para el último capítulo de su carrera quiere unificar cinturones en 115 contra el otro titular. Las peleas contra Kazuto Ioka, Jerwin Ancajas y, quizás lo más intrigante de todo, una revancha con Juan Francisco Estrada está en la parte superior de su lista de deseos. Incluso ha declarado su deseo de vengarse de Sor Rungvisai. No tendría quejas sobre ninguno de esos enfrentamientos.