La acidez de Helmut Marko en sus comentarios es harto conocida. El austríaco, asesor del equipo Red Bull de Fórmula 1, ha proferido fuertes críticas contra varios pilotos que pasaron por la escuadra de las bebidas energizantes, especialmente aquellos que no contaban con su beneplácito y amor. En los últimos tiempos, el blanco es Checo Pérez, compañero de su mimado Max Verstappen. Nadie pone en duda que el neerlandés es merecedor de todos los halagos, porque domina la categoría con una superioridad abismal y absoluta, en detrimento de los otros 19 pilotos, incluido el mexicano, quien, con un auto igual, muchas veces está más lejos de lo que debería. Ahora bien, el bueno de Helmut a veces termina en la banquina con sus comentarios, como en este caso.
Consultado Marko sobre la carrera de Checo en el pasado GP de Italia, dijo: “Fue, sin duda, una de sus mejores carreras. Tuvo algunos problemas en la clasificación. Es sudamericano y no puede concentrarse tanto como Max Verstappen y Sebastian Vettel", lanzó con total desparpajo.
Su comentario, teñido de tintes xenófobos, tiene varias aristas, cuanto menos, rebatibles. Inicialmente, el comentario en sí. Pero si se desmenuza un poco, primero, el austríaco debería buscar un mapa y ubicar a México, que se encuentra en América del Norte. Por otra parte, en su clara denostación a los pilotos de Sudamérica, habría que explicarle que 13 mundiales de Fórmula 1 fueron ganados por pilotos de la región.
Juan Manuel Fangio era sudamericano, de la Argentina, ganó cinco títulos y está en el Olimpo de los más grandes de la historia. Ayrton Senna, brasileño, logró tres coronas y muchos pilotos de hoy en día miran sus videos y lo idolatran. Nelson Piquet, con una personalidad controversial y frases desafortunadas al estilo Marko, también ganó tres títulos. Emerson Fittipaldi, un emblema del automovilismo, logró dos. José Froilán González, argentino, le otorgó la primera victoria en Fórmula 1 a Ferrari, en el GP de Gran Bretaña de 1951. Carlos Reutemann, subcampeón de 1981, fue señalado por Frank Williams como el piloto más inteligente que tuvo en su equipo. Rubens Barrichello y Felipe Massa ganaron carreras y fueron subcampeones con Ferrari. El colombiano Juan Pablo Montoya ganó siete Grandes Premios, entre ellos, Mónaco. Y los ejemplos podrían continuar.
Norberto Fontana, con pasado en Fórmula 1 y campeón en categorías europeas, posteó en su cuenta de Twitter: “Que muchacho Helmut, quiere o destruye a los pilotos, por suerte guardo un lindo recuerdo cuando le ganamos el campeonato de la F3 alemana en 1995, él era el dueño del equipo oficial Fiat que se llamaba RSM”.