Jamie Campbell-Walter, su mánager, aseguró que los equipos interesados en el argentino para 2025 hicieron un alto tras el accidente de Las Vegas y esperan ver su rendimiento en el cierre de la temporada.
La fulgurante aparición de Franco Colapinto en Fórmula 1 sorprendió a más de uno. Su paso por Fórmula 3 y Fórmula 2 no habían pasado de la media, salvo algunos chispazos. Pero no bien se sentó en el Williams, su rendimiento explotó. En Bakú, su segundo Gran Premio, sumó puntos y repitió en el quinto, Estados Unidos. En el medio, tuvo una sólida carrera en el durísimo urbano de Singapur. Esas actuaciones despertaron interés en otras escuderías, a sabiendas de que los de Grove no pueden darle una butaca de titular para 2025 porque ya tienen a Carlos Sainz y Alex Albon bajo contrato. Comenzaron los rumores, los dimes y diretes y las reuniones. A Christian Horner, director de Red Bull, se lo vio salir del hospitality de Williams en San Pablo. El interés del pope inglés se hizo fuerte, con la mente puesta en sentar a Franco en 2025 en un Racing Bull y, por qué no, en un Red Bull. Hasta Alpine, con Flavio Briatore, en su papel se asesor ejecutivo, se sumó a la compulsa. Pero llegaron los accidentes de Colapinto…
Los dos choques en la lluviosa pista de Interlagos, uno en clasificación y otro en carrera (con auto de seguridad en pista) fueron suficientes para el italiano que trabaja en Alpine. De hecho, Jack Doohan, la carta de salida si llegaba Colapinto, ya hasta tiene el 7 como número asignado para 2025. Pero Red Bull continuó con su interés. No solo por lo deportivo, es que la marca austríaca cortaría a Checo Pérez y necesitan una figura para mantener su fuerte presencia en el mercado latinoamericano de venta de bebidas energizantes. Básicamente, de lo que viven.
Oliver Mintzlaff, CEO de Red Bull, estuvo reunido con Williams en Las Vegas. El alemán solo estuvo un día en la ciudad del pecado para tener una reunión con los popes del equipo de Grove. Pero llegó el golpazo de Franco en la clasificación y, si bien las charlas siguen, la negociación entró en stand by. Está claro que los errores son cotidianos en la Fórmula 1 y nadie está exento. La lluviosa pista de Interlagos tuvo víctimas de peso como Carlos Sainz, Alex Albon y Fernando Alonso, solo por dar nombres. Y Lando Norris no podía llevar su McLaren por lo gris, aunque no sí pudo terminar la carrera. Y más aún si se trata de un piloto novato.
Para Franco se fueron sumando cuestiones. Su debut fue casi un cuento de hadas y la presión no la tenía. Sabía que en 2025 no tendría lugar de titular. Pero con el crecimiento de los rumores sobre una posible vacante en otro equipo, sumado a que, al conocer más el auto, más buscó los límites, dieron como resultado la llegada de los errores.
Jamie Campbell-Walter, quien junto a su esposa María Catarineu, regentea la carrera de Colapinto, marcó claramente la cancha: las carreras de Qatar y Abu Dhabi será clave para definir el futuro. "Tenemos que recuperarnos, seguir adelante y hacer nuestro trabajo. Y él tiene dos fines de semana más para demostrar su valía", dijo el inglés en una entrevista con Motorsport Magazine.
Campbell-Walter analizó los accidentados fines de semana de Brasil y Las Vegas que vivió su piloto: “En Brasil, Franco estaba en su sexto fin de semana de carrera y nunca había conducido bajo la lluvia. Estaba llorando por neumáticos para lluvia. Obviamente, el equipo sabía que se acercaba una bandera roja. Simplemente hay que sobrevivir, sobrevivir, sobrevivir. Luego lo hicieron parar en boxes con el coche de seguridad. Los neumáticos intermedios nuevos no son fáciles ni siquiera en los mejores momentos. Y en su vuelta de salida se abrió el cielo y le dijeron que apretara para mantener la temperatura en el neumático. Y se fue afuera haciendo aquaplaning. Así que eso no me preocupa tanto, porque es solo falta de experiencia, nunca había conducido bajo la lluvia y todas esas cosas pueden pasar. Y ese día les pasó a Alonso, a Sainz, a Alex... No es que fuera el único. Creo que el Williams no era muy fácil de conducir, porque hay que ver el hecho de que ambos se estrellaran”.
En cambio, el choque en la Q2 de Las Vegas fue más difícil para el mánager: “Ese fue un problema y una tontería. Y es un poco por la presión de no saber cuál es tu futuro, que a veces es mucho peor que saber cuál es. Y nunca se sabe qué les sucede a estos pilotos en esas situaciones de presión. No me malinterpreten, cada vez que se sube al auto, en realidad es una cuestión de presión. No olvidemos que ha hecho un trabajo fenomenal y no es uno de esos chicos que ha hecho cientos de vueltas de prueba. Kimi Antonelli, por ejemplo, está haciendo pruebas todas las semanas con Mercedes. Williams no tiene un auto y equipo de coche de pruebas. Franco solo hizo el entrenamiento de pilotos jóvenes el año pasado y la FP1 en Silverstone; así que no tiene mucha experiencia. Nunca ha hecho muchas pruebas como piloto, porque nunca tuvimos el presupuesto. Y también tiene la presión de una nación sobre sus hombros”, cerró el Campbell-Walter.
Helmut Marko, asesor deportivo de Red Bull, ya avisó que el lunes posterior al GP de Abu Dhabi habrá una reunión de la cúpula para decidir qué pilotos ocuparán las butacas de los cuatro autos de la marca, tanto Red Bull como Racing Bulls. Colapinto tiene, según dijo su mánager, dos finales para rendir y esperar. Si no se llegara a abrir esa puerta, el argentino tiene asegurado su puesto como reserva en Williams. En diez días, el panorama estará más claro.