La continuidad del argentino en el equipo Alpine está asegurada para la vuelta de las vacaciones, pero su rendimiento será evaluado carrera a carrera. ¿Y en 2026?
“No lo sé”, fue la respuesta de Franco Colapinto en el pasado GP de Hungría cuando fue consultado sobre si se veía como titular de Alpine en la vuelta del receso de vacaciones de Fórmula 1. El comentario del argentino fue genuino, nada se puede dar por seguro en la categoría, menos en un contexto en el que no respondió con rendimiento las expectativas que se habían depositado en él. Hay algo seguro: el bonaerense estará en el GP de Países Bajos que marcará el retorno del Mundial tras el descanso, pero su evaluación continuará carrera a carrera. En la escudería de Enstone decidieron darle todas las chances y el tiempo para que pueda mostrar sus condiciones, una política diametralmente opuesta a la que pusieron en juego con Jack Doohan. Colapinto sabe que para llegar hasta el GP de Abu Dhabi que cerrará la temporada deberá sacar a relucir parte de todo lo bueno que logró en aquellas ya lejanas primeras cinco competencias con Williams en 2024.
En ese contexto, aventurarse al 2026 sería prácticamente una tómbola. En F1 mandan los resultados y, también, el dinero. Si un piloto llega con una buena espalda financiera puede hacerse un hueco en la categoría. Después, para mantenerse, debe apoyarse en resultados. El sitio oficial del Mundial reveló cómo están las duplas de pilotos para la próxima temporada y en el caso de Alpine está confirmado Pierre Gasly. ¿Es extraño? No, es lógico y real. El francés es el único que tiró del carro del team en el año, otorgándole los 20 puntos que acumuló en 14 Grandes Premios.
No chocar, ser rápido y sumar puntos fueron los preceptos que Flavio Briatore le marcó como objetivo a Colapinto cuando lo sentó como titular de Alpine desde el GP de Emilia-Romagna. El argentino falló en los tres. Se pegó en Imola, le costó enormemente exprimir el A525, perdió recurrentemente con su compañero Gasly y es el único piloto de la parrilla actual que no anotó en 2025. Y a eso hay que sumarle el accidente que sufrió con el auto de este año en la prueba de Pirelli en Hungría.
También es cierto que el bonaerense se enfrentó a un auto que tiene una ventana de rendimiento escuálida, la escudería está última en Constructores y el motor Renault es el que menos empuja. Como si fuera poco, el combo se completa con problemas claros en la preparación de los autos y trabajos deficientes en boxes. Así, es complicado.
En medio de este panorama, el sitio neerlandés Racing News 365 publicó que el entorno de Colapinto explora opciones para 2026 y apunta a IndyCar y WEC. ¿Si este rumor fuera cierto, estaría mal? Absolutamente no. El argentino no tiene ni de cerca asegurado el lugar como titular para el año que viene y el trabajo de su gente es conseguirle posibilidades, aunque sus fanáticos más acérrimos intenten defensas que en algunos casos rayan el absurdo. Es F1 y en F1 nadie tiene asegurado su lugar. Por estos días, hasta Lewis Hamilton (no hace falta mucha presentación) está en danza por su año complicado con Ferrari y las voces se alzan a su alrededor…
Para aumentar más las dudas y la presión sobre Colapinto, Sergio Pérez está a un paso de firmar como piloto de Cadillac para 2026 (podría anunciarse en Monza). La escudería estadounidense se sumará el año que viene para completar una parrilla de 11 equipos. ¿Qué tiene que ver Checo con el argentino? El acuerdo del mexicano dejaría libre a Valtteri Bottas, cuyo nombre también sonó fuerte para la estructura que pertenece a General Motors. La idea de Cadillac es tener una dupla que mezcle experiencia (Checo) con juventud. Los nombres que suenan para acompañar al ex Red Bull son Jak Crawford (corre en F2 y es estadounidense), Felipe Drugovich (el ya histórico reserva de Aston Martin) y Alex Dunne (el irlandés que brilla en F2 y pertenece al programa de McLaren).
Bottas es el actual reserva de Mercedes y fue sondeado por Flavio Briatore, charlas que el mismo Toto Wolff (director de las Flechas) reconoció haber tenido con el italiano. “Hablamos varias veces sobre Valtteri”, dijo el austríaco en Gran Bretaña. Con la puerta de Cadillac cerca de cerrarse, la alternativa Alpine podría ser la única (y última) para Bottas.
Colapinto estará en Zandvoort a la vuelta de las vacaciones. Como ocurre en estos casos, el futuro estará en sus manos. Si logra despojarse de esas dudas que le genera el A525 y comienza a tener actuaciones convincentes, su futuro se enderezará. Canadá y Hungría fueron los puntos más altos del argentino, porque en ambas ocasiones le ganó a Gasly, avanzó a Q2 y mostró un buen ritmo de carrera. Esas actuaciones convincentes no significan sumar puntos como marcó Briatore, porque las falencias del Alpine muchas veces impiden pelear por los diez primeros lugares, pero exprimir cada resquicio que le otorgue su coche será imprescindible. Los rumores continuarán y no se trata de un complot de la prensa de Europa: si el rendimiento del argentino mejora y se sostiene, el ruido se apagará solo.
