Brock Purdy está enfocado en llevar su juego al siguiente nivel, tanto mental como físicamente.

SANTA CLARA, Calif. -- A medida que los San Francisco 49ers avanzaban en su programa de temporada baja, era difícil no ver, ni escuchar, al mariscal de campo Brock Purdy.

Durante las actividades organizadas del equipo y las prácticas del minicampamento, Purdy estaba claramente al mando. En las salas de reuniones y en el vestuario, los compañeros de equipo dicen que Purdy habló más. Estaba muy lejos de la temporada baja de 2023, cuando Purdy se estaba recuperando de un desgarro del ligamento colateral cubital del codo derecho y no podía llevar al campo nada del trabajo que estaba haciendo en el aula.

Este año ha sido diferente. Totalmente sano, tras una gran campaña y capaz de pasar toda una temporada baja como titular afianzado, Purdy ha podido concentrarse en elevar su juego, tanto mental como físicamente, a otro nivel.

"Esta vez definitivamente está por delante de donde estaba el año pasado", informó el entrenador Kyle Shanahan. "Ha sido fantástico para él guiarnos durante toda la temporada baja, en los ejercicios y en todo. Ha sido fantástico tenerlo durante una primera temporada baja completa".

Tanto para los Niners como para Purdy, tener juntos una temporada baja completa llega en un momento ideal. San Francisco viene de una estrecha derrota en tiempo extra ante los Kansas City Chiefs en el Super Bowl LVIII, ha avanzado al menos al Juego de Campeonato de la NFC en cuatro de las últimas cinco temporadas y está cada vez más desesperado por superar el obstáculo y ganar otro Trofeo Lombardi.

Purdy superó el estatus de Mr. Irrelevant, se mantuvo sano y reunió un currículum lo suficientemente sólido y extenso como para posicionarse para una lucrativa extensión de contrato la próxima temporada baja.

Como QB1 incuestionable, la temporada baja de Purdy ha consistido en dar el siguiente paso como líder de equipo, ya sea haciendo su voz más fuerte entre sus compañeros o trabajando en la sala de pesas para hacerse más grande, más rápido y más fuerte.

"Para mí fue como si esta fuera una temporada baja diferente", aseguró Purdy. "Es bueno que no tengo que estar en este calendario y régimen de rehabilitación, rehabilitación, rehabilitación, recuperarme y estresarme sobre si voy a regresar para la temporada o no. Simplemente tenemos una temporada baja para respirar y reflexionar sobre los últimos dos años porque ha sido ir, ir, ir. Para mí ha sido realmente bueno, solo mentalmente y cómo tener esa hambre de regresar y estar listo para el ruedo".

Las fechas y los momentos todavía están frescos en la mente de Purdy. El recuerdo de la rotura del ligamento colateral cubital de su codo derecho durante el Juego de Campeonato de la NFC de 2023 frente a los Philadelphia Eagles seguido de una cirugía en marzo, también. Si bien estuvo en el equipo esa temporada baja y esperaba volver a ocupar el puesto titular cuando estuviera sano, hubo cierta incertidumbre hasta que se le autorizó por completo a regresar.

Purdy pasó esas OTA y el programa de temporada baja estudiando recortes con Shanahan y el entrenador de mariscales de campo Brian Griese. Cuando llegó el momento de trasladar al campo lo que aprendió en esas sesiones, lo mejor que Purdy pudo hacer fue observar desde la banca y tomar las repeticiones mentalmente. Shanahan dijo que Purdy estaba frustrado por esas circunstancias, pero rápidamente notó un rebote adicional en el paso de Purdy cuando pudo saltar desde el primer día de la primera fase del programa de este año.

Durante el estudio de postemporada sobre su desempeño en 2023, Purdy encontró muchas cosas en las que quería trabajar. Si bien lanzó para un récord de franquicia de 4,280 yardas y se convirtió en el primer mariscal de campo de los Niners desde Jeff García en 2001 en lanzar para más de 30 touchdowns en el camino hacia su primera nominación al Pro Bowl, Purdy vio lapsos ocasionales en sus progresiones, juego de pies y gestión del juego. También quería seguir creciendo hacia el papel de liderazgo que inherentemente conlleva el puesto.

"De eso es de lo que hablamos", comentó Griese. "Conciencia situacional además de todas las progresiones y luego crecer como líder fuera del campo y en el vestuario y lo que eso implica y cómo se ve. Y a medida que adquieres más experiencia y estatus en el equipo y la liga dentro de la organización , qué oportunidades se presentan para que ustedes tomen una voz un poco más grande y establezcan responsabilidad y expectativas".

En el aspecto físico, Purdy obtuvo excelentes críticas de compañeros de equipo y entrenadores, y obtuvo algunas reacciones virales en las redes sociales a sus fotos después de agregar algo de músculo a su estructura de 6 pies 1 pulgadas (1.85 m) y 220 libras (99.7 kg). Purdy quería crecer para poder lidiar mejor con el desgaste de la temporada y sentía que una mitad inferior más fuerte también ayudaría a reforzar la fuerza de su brazo.

La rutina de ejercicios de Purdy, que planea continuar en Florida antes del campamento de entrenamiento, también se centró en agregar flexibilidad y movilidad.

"Cuando llega la temporada, lo que importa es estar en la mejor forma posible para lo que es un maratón", señaló Purdy. "Poder correr, hacer jugadas, lanzar el balón, mantenerme en forma. Me estoy preparando para eso ahora mismo".

En el aspecto mental, Purdy se ha tomado con calma todo lo que viene con su surgimiento. Su celebridad ha crecido, reconociendo que lo reconocen más a menudo cuando sale al Área de la Bahía y hace apariciones aquí y allá, como hacer el primer lanzamiento en un juego de los San Francisco Giants.

Como muchas de las principales estrellas de los Niners se rehabilitaron de una lesión o no participaron en el programa de temporada baja, Purdy no rehuyó tener una voz más fuerte en el campo de práctica o en las reuniones. Esa gran temporada de 2023 ha ayudado a que la confianza de Purdy crezca y, con eso, sus compañeros de equipo han seguido gravitando hacia él, aunque insisten en que no ha renunciado a su enfoque humilde en nombre del liderazgo vocal.

"Creo que definitivamente se está haciendo un poco más vocal dentro del edificio", indicó el ala Nick Bosa. "No creo que sea alguien que vaya a cambiar incluso cuando le paguen el próximo año".

Si bien la temporada baja de Purdy ha tenido mucho que celebrar, incluida una boda y una luna de miel con su esposa, Jenna, la del próximo año podría ser aún más grande. Purdy está entrando en el tercer año de su contrato de novato y está previsto que gane un salario base de sólo $985,000 con un tope salarial justo por encima de $1 millón.

Eso significa que Purdy seguirá siendo una de las mejores gangas de la NFL por un año más. Como señala Bosa, es casi seguro que eso cambiará el próximo año cuando Purdy sea elegible para negociar una extensión de contrato por primera vez.

Cuando eso suceda, el salario de Purdy podría multiplicarse más de 50 veces, un aumento casi impensable para un jugador que casi no fue reclutado en el draft de 2022. Pero antes de que algo de eso suceda, Purdy sabe que debe recordar las lecciones aprendidas de la temporada pasada y del trabajo de su primera temporada baja completa, y convertirla en otro gran año en el campo.

"Estoy tratando de ganar este año y hacer todo lo que pueda por esta organización", dijo Purdy. "Todo lo demás sucede como sucede... Quedarse demasiado atrapado en todo ese tipo de cosas es, para mí, una tontería. Lo estoy tomando día a día y mejorando".