Lionel Scaloni, entrenador de la Selección Argentina, ya tiene definida la formación titular que pondrá en cancha en el debut en la Copa del Mundo de Qatar frente a Arabia Saudita. Sin embargo, el DT eligió no confirmarla en la conferencia de prensa previa al estreno: "El equipo está decidido. Se los dije a los jugadores hoy. Es el que vienen diciendo todos, no habrá cambio de esquema y no sale de lo que estuvimos probando estos días". Y ante la referencia puntual de si el reemplazante del ausente Giovani Lo Celso será Alexis Mac Allister o Alejandro Gómez, Scaloni dio una pista pero volvió a guardarse la información: "Juega uno de los dos".
Fiel a su estilo, con la tranquilidad que lo caracteriza, el director técnico busco salir del protagonismo en el que rivales y medios de comunicación ubican al seleccionado argentino, junto con el brasileño: "Los grandes favoritos, normalmente, no ganan los Mundiales. Hay no menos de 8 selecciones que pueden ganar esta Copa del Mundo. La mayoría son europeas. Los sudamericanos no llegaron a las últimas finales, excepto Argentina en 2014, donde perdió injustamente. Los detalles son fundamentales para ser campeón del mundo y no necesariamente gana el que juega mejor".
Scaloni, además, si bien conoce la relevancia que el fútbol tiene en Argentina, le quitó dramatismo al Mundial: "Tendría que ser solo un juego, un deporte. Con las ganas y la pasión de los argentinos, con todo lo que llevamos adentro, aunque no deja de ser un juego. A partir de ahí, somos un grupo que dejará todo en esta competencia, pero la vida real sigue después del Mundial".
En la misma línea de dejar de lado las presiones, el entrenador reconoció que la obtención de la última Copa América liberó a los futbolistas de la Selección Argentina: "El equipo sale a jugar mucho más tranquilo porque la presión externa de no haber ganado ya no está. Antes les decía 'mañana sale el sol otra vez' porque era la única manera de que intentasen desarrollar nuestro fútbol. Debemos salir liberados, más allá de los matices que tiene el hecho de disputar una Copa del Mundo. La carga emotiva del debut es diferente, pero ellos están más liberados que antes, y pueden exprimir el fútbol que tienen y saben desarrollar".
En el plantel argentino, solo 7 futbolistas participaron de Mundiales anteriores. Scaloni les transmitió calma a los que harán su estreno en la competencia más importante: "Venimos a jugar al fútbol, lo tomamos como algo natural y le sacamos dramatismo. Que disfruten adentro de la cancha porque ellos saben lo que tienen que hacer. Las cosas se pueden poner difíciles, pero sabrán afrontar las situaciones".
Luego de la derrota de Qatar en el partido inaugural frente a Ecuador y la caída por goleada de Irán frente a Inglaterra, a Scaloni le sugirieron que los seleccionados asiáticos son débiles. El director técnico argentino no aceptó esa premisa: "Ecuador ganó muy bien y es una Selección de un nivel altísimo, como dije cada vez que nos tocó enfrentarlo. Inglaterra es un equipo potente. No me atrevo a decir que las selecciones árabes están por debajo. Hay que demostrar que uno es favorito. La carga emotiva del debut es diferente. El primer partido es importante y hay que intentar ganar, con nuestras formas".
Scaloni hizo referencia al fanatismo por Lionel Messi, no solo de parte de los hinchas sino de los rivales, como el caso del DT de España: "Luis Enrique lo conoce y sabe lo que significa entrenarlo y compartir con él. Cuando estamos con la Selección, lo disfrutamos y esperamos que los argentinos y todos los espectadores del mundo también lo hagan. Leo es una maravilla. Los elogios siempre quedan cortos y lo único que queda es disfrutarlo".
Respecto al calor y la atípica época del año en la que se disputa este Mundial de Qatar, Scaloni dijo: "El clima es mejor de lo esperado, no es tan extremo. Los jugadores tuvieron un mes de octubre terrible, cargadísimo de partidos. Tuvimos que gestionar los entrenamientos de esta semana para que todos lleguen de la mejor manera. La clave fue la cantidad de actividad de octubre y no la época del año".
Esa intensidad de las competencias y el corto tiempo entre la pausa de las ligas y el inicio del Mundial hizo que aparecieran muchos lesionados, entre ellos Nicolás González y Joaquiín Correa, quienes debieron ser dados de baja por Scaloni. "La decisión de los dos jugadores que se fueron es porque no daban garantías de poder estar bien en el resto del torneo. Fue dolorosa y durísima, pero pensamos en el bien del equipo. Se fue Joaquín que podía jugar por dentro y por fuera y Ángel nos da eso. En el caso de Nico, la mayoría de las veces jugó por izquierda y Tiago nos puede ofrecer eso, aunque con diferentes características. Ahora tenemos a los 26 jugadores a disposición, no como en la Copa América en la que siempre tuvimos que dejar afuera a alguno por lesión. Podremos recurrir al que necesitemos", explicó el entrenador.
En el entrenamiento de este lunes Scaloni fue el primero en salir a la cancha, con una pelota a la que dominaba cercana al pie derecho. "Cuando jugaba no la llevaba nunca", se animó a reírse de sí mismo el entrenador, quien disputó el Mundial 2006, con José Pekerman como DT y Messi como compañero. El DT argentino aseguró que pisar el césped lo hace sentir a gusto: "Lo que mejor llevamos es el día a día, disfrutamos de estar acá y de vivir un Mundial. Los momentos complicados son antes de un partido. En la cancha tenemos tranquilidad. Sabemos que el equipo está bien y llegamos al partido de la manera que queríamos".
El inicio del ciclo de Scaloni, con sus nulos antecedentes como entrenador principal, estuvo repleto de dudas sobre su capacidad. Sin embargo, el tiempo, el juego y los resultados afianzaron al director técnico en su cargo."Nunca tomé las críticas como algo negativo. Sabía la dirección que teníamos que tomar y lo sabemos ahora. No estamos obligados a ganar la Copa del Mundo, para nada. Respetamos a los rivales. Vinimos a competir y esperamos mostrar un fútbol que a la gente le agrade".
Lionel Scaloni está tranquilo y lo demuestra. El camino hacia el debut en el Mundial ya está recorrido. Solo resta esperar a que Argentina dé el primer paso ante Arabia Saudita.