Los primeros partidos de octavos de final de la Copa de Asia culminaron con el sorprendente pase a cuartos de Vietnam, que ganó a Jordania en la tanda de penaltis, con el sufrimiento la China de Marcelo Lippi ante Tailandia (1-2) y con la clara clasificación de Irán, que ganó 2-0 a Omán.
Vietnam superó la fase de grupos en una posición moral complicada. Fue el peor de los terceros y alcanzó casi de casualidad los octavos de final tras empatar a todo con Líbano y superarle en la clasificación de juego limpio.
Con esas credenciales, y tal vez con menos presión que Jordania, primera del Grupo B por delante de la vigente campeona, Australia, los hombres del coreano Park Hang-seo hicieron historia después de alcanzar por segunda vez los cuartos de final.
Anteriormente lo lograron en 2007, en el torneo organizado a cuatro bandas entre Tailandia, Malasia, Indonesia y los propios vietnamitas, que entonces fueron eliminados por Irak tras perder 2-0. Ahora, tendrán la oportunidad de superar su mejor registro gracias a sobrevivir a una tanda de penaltis ante Jordania que se decantó de su lado.
Antes, el combinado vietnamita tuvo que remontar el tanto inicial de Baha Abdel-Rahman, que marcó un golazo de falta en la primera parte para encarrilar el choque hacia el lado jordano. Entonces, apareció Nguyen Cong Phuong para hacer el empate con una volea casi justo en la reanudación con la que mandó el choque a una prorroga que no arregló nada.
Los fallos desde los once metros de Baha Faisal y de Ahmed Al-Ersan, privaron a Jordania de repetir los cuartos de final que consiguió en Catar 2011 y en China 2004. Sin embargo, dejaron una estampa feliz para Vietnam, que llegaron casi invitados a los octavos y alcanzaron la siguiente fase. Se enfrentarán al ganador del Japón-Arabia Saudí.
También se clasificó China, que sufrió para eliminar a Tailandia. La selección dirigida por el técnico italiano Marcelo Lippi tuvo que dar la vuelta al marcador tras un gol de Supachai Jaided en la primera parte. El delantero del Buriram aprovechó la dejadez de la defensa china para marcar casi a placer el primero con un remate desde dentro del área pequeña.
China tuvo que esperar hasta el tramo final para solventar sus dudas y evitar su eliminación. Primero, Xiao Zhi, en el minuto 67, empató tras recoger el rechace de un cabezazo que despejó el portero Sivaruck Tedsungnoen.
Después, en el minuto 71, Gao Lin transformó un penalti claro cometido por Chalermpong Kerdkaew sobre él mismo. Su tanto, permite soñar a China con su primer título después de quedar subcampeón en dos ocasiones.
La Irán del entrenador portugués Carlos Queiroz consiguió la clasificación de manera más plácida. Después de pasar a octavos de final como primero del Grupo D empatado a siete puntos con Irak, solventó su pase con una victoria clara por 2-0 frente a una selección que se clasificó entre los mejores terceros.
El centrocampista del Brighton Alireza Jahanbakhsh, con un tanto en la primera parte, y Ashkan Dejagah, de penalti antes del descanso, clasificaron a su selección, que se enfrentará en la siguiente ronda a China.