Elena Rybakina (11ª de la WTA) pasó a los octavos de final de Roland Garros luego de vencer a Jelena Ostapenko (21ª), con un contundente 6-2 y 6-2 en una hora y 16 minutos de juego.
El primer set del juego fue muy irregular, con muchos errores de ambos lados. Sin ir más lejos, la oriunda de Riga tuvo siete doble faltas, cinco de ellas apenas en el game inicial.
La kazaja y la letona ya se habían enfrentado en cinco ocasiones en el circuito. Con tres victorias, todas de forma consecutiva, y dos derrotas. La pupila de Davide Sanguinetti lidera un ajustado historial que tuvo su primer duelo en Linz 2019. El último antecedente entre ambas había ocurrido en Cincinnati 2023.
La nacida de Moscú, pero que representa a Kazajistán, acumula una racha de siete victorias consecutivas luego de conquistar su novelo título como profesional en Estrasburgo. Lo curioso es que si bien es una jugadora que se desempeña mejor en canchas rápidas, cuatro de sus nueve trofeos los ganó sobre polvo de ladrillo (Bucarest 2019, Roma 2023, Stuttgart 2024 y Estrasburgo 2025).
La campeona de Roland Garros 2017, por su parte, tuvo su mejor actuación en este 2025 en el WTA 500 de Stuttgart cuando ganó el título luego de dejar en el camino a Iga Swiatek, y de vencer a la número 1 Aryna Sabalenka en la final.
Además de pelear por el título, Rybakina buscará en esta edición de Roland Garros regresar al Top Ten. Luego de un inicio de temporada bastante irregular, no pudo defender puntos importantes en el ranking y fue quedando relegada.
Por lo pronto, en su camino ya tiene a su rival confirmada: Iga Swiatek (5ª). El historial se encuentra igualado con cuatro victorias por lado, aunque las últimas dos, ambas durante esta temporada, quedaron en manos de la campeona defensora. Sin embargo, los únicos dos duelos sobre polvo de ladrillo fueron para Elena: en las semifinales de Stuttgart 2024 y en los cuartos de Roma 2023 (la polaca se retiró en el set final).
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