Danielle Collins (10ª del ranking WTA) es una de las verdaderas protagonistas en el circuito femenino en la temporada 2024. Tanto por sus flamantes resultados en cancha como por su carisma y desenvoltura para hablar ante los micrófonos de la prensa.
La estadounidense, de 30 años de edad, que al perder con Iga Swiatek en la segunda ronda del Abierto de Australia anunció que se retirará del tenis a final de año, y desde allí hilvanó títulos en Miami y Charleston, dejó un testimonio en que dejó tela para cortar.
En diálogo con Tennis Channel y consultada por su decisión de jugar el WTA 500 de Estrasburgo días antes del inicio de Roland Garros, la norteamericana, dueña de cuatro títulos WTA, afirmó que lo hizo para juntar dinero y poder "pagar las cuentas".
"La mejor preparación son los partidos. Estuvo bien que organizaran un torneo de nivel 500 la semana antes de un Slam y pude jugar algunos partidos muy buenos. Sentí que ése sería el mejor entrenamiento para mí".
"Así que no tuve ninguna duda. Poir un momento pensé en no ir. Luego me dije: 'Te vas a aburrir'. También, siendo realista... tengo cuentas que pagar, ¿de acuerdo? Tengo cuentas que pagar y en las semanas de práctica, no ganás dinero", se sinceró entre risas.
Cabe mencionar que Collins llegó hasta la final del evento y cayó con su compatriota Madison Keys. Ya en París, superó la primera ronda ante Caroline Dolehide y enfrentará a la serbia Olga Danilovic por un lugar en la tercera ronda.