Saúl 'Canelo' Álvarez (57-2-2, 39 KO's) no se ha cansado de hacerle saber a todos que su relación con Gennadiy Golvkin (42-1-1, 37 KO's) traspasó el límite de lo profesional para convertirse en algo "personal" y por ello, saldrá a noquearlo cuando le enfrente el sábado en la T-Mobile Arena de Las Vegas, Nevada.
Pero una cosa es decirlo, y otra bien distinta es hacerlo. En especial si el peleador kazajo nunca ha sido noqueado en su carrera profesional que ya se extiende a 16 años, y el mexicano viene de una derrota contundente ante el ruso Dmitry Bivol (20-0-0, 11 KO's) en la división semipesada (175 libras).
De cómo llegan física y mentalmente el azteca y el kazajo al tercer capítulo de una de las trilogías más cruentas de la última década dependerá en gran medida el resultado final de la contienda. Pero, ¿cuáles son las claves para la victoria de uno o del otro? Los expertos de ESPN Digital nos brindan algunas coordenadas.
Víctor López: De un principio pensé que la pelea de trilogía favorecería a Canelo, y a pesar de la derrota ante Bivol, sigo pensando que tiene un camino más claro hacia la victoria.
Sacando al lado la diferencia de edad, y que GGG debuta en las 168 tras una carrera completa en peso mediano, dentro del ring Canelo aún tiene las herramientas en su mejor momento para llevarse la victoria. Debe usar su boxeo al principio para tantear el poder de GGG en el nuevo peso, si lo aguanta o no. Conoce muy bien a su archirrival, excepto cómo se sentirá su pegada en un peso más alto.
De ahí, debe empezar a presionar, sofocar y desgastar a GGG en lo que espero que sea un paro tarde a favor del mexicano.
GGG también conoce muy bien a Canelo y de seguro vendrá con un plan de ataque que involucra su poder, el cual es claramente su carta de la victoria. Más pesado, sus pies, sus manos y su movimiento pueden sufrir, pasando a depender de su poder para ganar la pelea. No creo que ocurra, pero un golpe en el boxeo siempre puede marcar la diferencia.
Damián L. Delgado Averhoff: Son 24 asaltos de "estudio" entre estos dos rivales que a juzgar por sus cruces de declaraciones se odian... y mucho. Aunque Jonathan Banks, entrenador del kazajo, asegure que el boxeo de uno y otro ha cambiado mucho desde que se enfrentaron por última vez en septiembre de 2018, ambos se conocen a la perfección y es probable que comiencen desde temprano a agredirse en busca del nocaut que finalmente valide quién es mejor que quién.
Es vox populi que Canelo sale como favorito. Su juventud (32 años) contrasta con los 40 años de Golovkin. Estar aclimatado a las 168 libras le ofrece una ventaja considerable, no sería de extrañar que sea él quien ponga la presión. Ahí está la clave del mexicano para ganar. Presionar a un boxeador que cargará más peso del acostumbrado y entre sus virtudes no está el evadir golpes.
Mientras que GGG tendrá que administrar sus fuerzas milimétricamente. Meterse en el toma y daca temprano podría ser fatal; debería aprovechar que Canelo es un blanco relativamente estático y golpear en combinaciones, pero también buscando el cuerpo, no solo a la cabeza. Según Compubox, GGG solo aterrizó 8 y 6 golpes al cuerpo en la primera y segunda batalla, respectivamente. Ablandar al Canelo trabajando al cuerpo podría marcar la diferencia, aún más cuando se rumora que el mexicano ha tenido que exigirse para estar en el peso. No olvidar que peleó en mayo en el límite de las 175 libras.
Jaime Vega Curry: Tan simplista como pueda sonar, pero la clave para Canelo bien podría reducirse en esta ocasión a ejecutar su típico plan de pelea: un par de rounds para tomarle la medida al rival -sí, tomarle la medida a un adversario con el que ha batallado 24 asaltos, pero que ahora debuta en las 168 libras-, presionar desde los asaltos intermedios y apretar el paso en el último tercio rumbo a otra victoria por puntos. Y esta vez, probablemente más clara que las anteriores.
Vi ganar a GGG la primera pelea entre ambos, y al menos empatar la segunda, pero el tiempo no perdona. Es poco, quizás nulo, lo que Golovkin pueda hacer diferente. Y Canelo sabe que le resiste la pegada al kazajo, se ha mantenido más activo, es más joven y está en un peso que le resulta más natural que a su oponente.
Debe además cuidarse de caer en provocaciones, tales como responder excesivamente a la presión del público que le reclame tras su reciente derrota, y entrar en un toma y dame temprano con un pegador del nivel de GGG que provoque desgaste innecesario, o una cortadura o hasta más.
En el caso de Golovkin, es mucha la tentación de afirmar que tiene que hacer la pelea perfecta, evitar caer en las engañosas fintas del Canelo, imponer respeto temprano y ganar round por round... pero, ¿no es eso acaso lo que hizo en las primeras dos peleas, y no fue suficiente para que los jueces le hicieran justicia? ¿Qué puede hacer GGG, a los 40 años y peleando por arriba de su peso, que no haya hecho antes contra un oponente de su mismo nivel durante 24 aguerridos asaltos?
Solo queda entonces hacer algo diferente; riesgoso, pero quizás determinante: jugársela. Es decir, salir a buscar el nocaut de inmediato. Canelo no comienza rápido, sino que calienta a medida que avanza la pelea y podría verse sorprendido. Ciertamente es tarea de proporciones épicas intentar noquear a alguien del aguante del Canelo, que solamente se ha visto genuinamente lastimado una vez en su vida, pero si GGG logra al menos sembrar la duda desde el arranque, ya tendría un paso adelantado en un pareo en el que, por lo demás, parece tener todo en su contra.
Carlos A. Nava: Saúl 'Canelo' Álvarez y Gennady Golovkin saben que buena parte de su legado a la historia del boxeo depende de la pelea de este sábado; la tercera entre ambos y en la que deben salir con mayor claridad en todos los aspectos incluido el resultado, después del controversial empate y una victoria para el mexicano.
Canelo Álvarez sabe que el único resultado que le sirve ahora es una victoria clara y qué mejor que noqueando. La clave será salir a agredir y hacer que Golovkin vaya para atrás, que es una de sus pocas debilidades porque siempre ha sido un agresor que va para enfrente.
El mexicano deberá tener cuidado con el contragolpe, que es una de las pocas debilidades que tiene, cuando le entra castigo en retirada después de agredir. Tiene que demostrar que está en su peso natural y que es capaz de soportar metralla enemiga, así como lo ha hecho contra peleadores de mayor peso y alcance, como sucedió con Bivol.
Para Golovkin, la clave será evitar que Canelo se meta en la corta distancia a golpear al cuerpo, seguido de combinaciones arriba. Es la primera vez que persigue un campeonato en las 168 libras y desde su último enfrentamiento con el mexicano, no ha chocado con nadie que tenga esa contundencia en su golpeo.
El kazajo tiene que encontrar la manera de convertirse en el agresor permanente y salir a dar "una pelea de perros". No puede darse el lujo de llegar a la distancia y dejar el resultado a los jueces.
Tiene que asfixiar a Canelo con velocidad hacia el frente; como hizo Bivol.