Lawrence Okolie retiene cinturón crucero ante David Light

No hubo Salsa tampoco depredadores en la Manchester Arena de Inglaterra cuando el británico Lawrence Okolie derrotó por decisión unánime al neozelandés David Light y retuvo el cinturón crucero de la Organización Mundial de Boxeo (OMB).

El soporífero combate, de bajísimo nivel técnico y que no parecía una pelea titular, menos para encabezar una cartelera, terminó con abucheos del público. Los jueces votaron 116-112, 117-110 y 119-108, a favor del púgil local que prevaleció en su tercera defensa del título que obtuvo el 20 de marzo de 2021 al noquear al polaco Krzysztof Glowacki (32-4-0, 20 KO's).

"(David) fue un peleador muy duro. Su táctica me incomodó. Se movía a la derecha y eso complicó las cosas. No me sentí frustrado, pero al final gané que es lo que importa", dijo Okolie que agregó que para su futuro estará listo para cualquier reto. "Pelearé con cualquiera que esté dispuesto a pelear".

'The Sauce' se limitó a pegar con el jab, tirar golpes aislados de su mano de poder, la derecha, y luego abrazar a su oponente, que llegó con récord invicto y un sobrenombre aterrador, 'The Great White' (El Gran Tiburón Blanco), pero no pasó de ser una sardina que hizo poco o nada en la primera oportunidad titular de su carrera.

Con este triunfo, Okolie, de 30 años, mejoró su récord profesional a 19-0-0, 14 KO's, mientras que Light, de 31, quedó en 20-1-0, 12 KO's.

El único momento del combate donde hubo acción fue en el 10mo asalto, cuando Okolie conectó varias derechas en gancho que pusieron en alerta al retador que se cubrió bien y pudo campear el vendaval.

Del resto del pleito muy poco que reseñar. Okolie marcando con el jab, tirando la derecha de manera aislada y de inmediato amarrando para evitar el contragolpe, al extremo que en el round 11 el referí tuvo que quitarle un punto por ese motivo.

Por su parte, Light pasó el combate tratando tímidamente de cortar el ring, pero sin representar verdadero peligro para el campeón.