Ryan García, ¿influencer o boxeador? Es la pregunta que muchos se hacen y que finalmente tendrá respuesta este sábado 22 de abril cuando enfrente a Gervonta Davis en la T-Mobile Arena de Las Vegas, Nevada, en un peso pactado de 136 libras.
Todos, sin excepción, despejaremos la duda de hasta dónde puede llegar el peleador de 24 años, nacido en Victorville, California, pero de raíces mexicanas, que se ha ganado una reputación en redes sociales, al punto de contar con 9.5 millones de seguidores en Instagram, y también en el ring de boxeo, sobre todo por su velocidad para lanzar golpes.
'King Ry' por primera vez enfrentará a un peleador de las grandes ligas del boxeo, que ESPN lo tiene ubicado en el puesto No.3 de peso ligero, es uno de los principales rostros del deporte a pesar de que todavía no ha sido incluido en la lista libra por libra y Caesar Sportsbook lo tiene como favorito -260 por +210 de Ryan.
Pero, ¿cuál es la historia del púgil que, si sale airoso el sábado, tiene todas las papeletas para recibir la estafeta del mexicano Saúl 'Canelo' Álvarez, como el peleador más popular y mejor remunerado del momento? Aquí te presentamos algunos momentos que han marcado su vida y su ascenso.
Pelotero que no fue...
Ryan contó que su primer amor fue el béisbol. Pero el idilio apenas duró porque, a pesar de su corta edad, no le gustaba depender del grupo para brillar. Dijo Ryan que la gente a su alrededor le veía como el próximo Babe Ruth.
¿Cuánta verdad hay en la analogía? Imposible de determinar, la tendencia a exagerar situaciones del pasado es inherente a todos los seres humanos. Lo que sí no tiene discusión es que desde la infancia Ryan quería asumir toda la responsabilidad en su éxito o el fracaso.
"Quería un deporte en el que pudiera ser uno contra uno. Mi tío me mostró un video de un deporte llamado boxeo. Yo estaba como, 'está bien, lo intentaré'", dijo en una ocasión a Interview Magazine. "Me llevó a su garaje y me puso un par de guantes, y justo cuando di ese primer jab, me enamoré del sonido del guante. Ese chasquido".
Desprecio al boxeo amateur
Si hay un deporte que dista de parecerse en sus versiones aficionada y profesional ese es el boxeo. Frecuencia de peleas, cantidad de asaltos, peso de los guantes, sistema de puntuación y remuneración son solo algunos de los aspectos que marcan diferencias entre ellos.
Contrario a la mayoría, Ryan aborrecía el amateurismo. Y en consonancia, apenas permaneció con esa condición para debutar en el boxeo de paga, renunciando incluso a la posibilidad de participar en los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro 2016.
Acababa de ganar el Campeonato Nacional Juvenil de Estados Unidos, con 17 años, y cinco meses después, el 9 de junio de 2016 se estrenó como profesional.
"Despreciaba a los aficionados. Si atrapaba al tipo con el mismo tipo de golpe en la vida real, sabía que lo tumbaría", declaró García en una oportunidad a Sports Illustrated.
Puede que no lo sea, pero luce pretensiosa su declaración de que despreciaba el boxeo amateur porque sencillamente como aficionado no fue tan dominante como pretende hacer ver.
De acuerdo con boxrec.com, Ryan ganó 29 peleas, perdió 15 y no propinó un solo nocaut en su carrera amateur. Si bien se despidió con un triunfo en el torneo más importante de Estados Unidos en su categoría de edad, él tuvo balance de dos victorias y dos derrotas con Devin Haney, y un revés ante Shakur Stevenson, dos peleadores que sí están incluidos hoy en el ranking libra por libra.
Máquina de hacer dinero
Los reguetoneros suelen darse bombo y platillo con el tema del dinero. La alusión al poder monetario "es de las más manoseadas en sus letras" (bueno, si a eso se le puede llamar letra), y King Ryan no ha necesitado alardear de eso para serlo.
Sin haber ganado un solo título mundial, algo que tampoco logrará contra Gervonta porque no hay cinturón en juego, es uno de los atletas más comerciables del mundo.
Si bien salió en los últimos dos años de la lista de los 100 atletas más comerciables del mundo que elabora Sportspromedia cada año, en 2020 ocupó la posición número 12, por encima incluso de Tyson Fury y Anthony Joshua.
Una victoria inobjetable sobre Gervonta Davis es muy probable que le devuelva a ese ranking en 2023. Y es que Ryan cuenta con los atributos necesarios para ser una verdadera "máquina de hacer dinero": joven, un fenómeno de redes sociales, bien parecido, carismático, con excepcionales cualidades deportivas y la dualidad de ser estadounidense, pero con raíces mexicanas, dos de las nacionalidades con mayor número de habitantes y más propensas al consumo.
Canelo: amigo perdido, enseñanza ganada
Salirse del Team Canelo, y de entrenar con Eddie Reynoso en febrero de 2022, provocó la ruptura de Ryan García con la estrella mexicana. Hubo cruce de palabras entre ambos, que destruyó la amistad que habían construido.
García argumentó que su decisión de marcharse y regresar a las órdenes del entrenador Joe Goossen, con quien trabajó cuando apenas tenía 17 años, obedecía a que Reynoso no le dedicaba el tiempo que él requería.
Canelo reaccionó a su partida declarando que "a mis ojos, está perdiendo mucho tiempo y malgasta su talento. Lo miro y no lo veo 100 por ciento dedicado y, para nosotros, esa es una mala señal. Siempre le recordamos como equipo que venga al gimnasio, que entrene y que aprenda porque necesita estar en el gimnasio".
Aquellas palabras incomodaron a Ryan que ripostó con "creo que no me apreciaba tanto como parecía. Yo tengo un buen corazón, buenas intenciones y ahora estoy en un buen lugar. Lo que pasó no cambiará mi manera de ser ni cómo lanzo los golpes. No sé porque habló con la prensa antes de hablar conmigo. Me dio la espalda".
La controversia no se detuvo allí, de vez en vez, uno y otro han mantenido la tirantez. Sin embargo, Ryan no es tonto y parece haber absorbido conocimientos importantes durante ese periodo de unión: "Canelo, hombre, he visto su ética de trabajo. Si no crees que me estoy empapando de este conocimiento, debes estar loco porque no soy una persona ignorante".
Problemas con la ansiedad
Ser el centro de atención puede pasar factura. A eso se expuso y tuvo que aprender a lidiar con la ansiedad y la depresión. García tuvo la suficiente valentía para reconocer que necesitaba ayuda y por ello canceló su pelea del 9 de julio de 2021 con el dominicano Javier Fortuna.
Dada su aptitud para ser el centro de atención en estos días, puede sorprender que García haya tenido que superar la ansiedad y la depresión cuando era adolescente.
"Sé que esta noticia podría decepcionar a algunos de mis fans, pero estoy anunciado hoy que no podré participar en la pelea que tenía el 9 de julio. En este momento, es importante hacerme cargo de mi salud y bienestar", escribió en sus redes sociales. "He tomado la decisión de tomar un tiempo fuera para enfocarme en convertirme en una versión más fuerte de mí. Espero estar pronto de vuelta y espero hacerlo una vez que me encuentre más saludable. Quiero dar gracias a Dios, a mi familia, a mis doctores y a mis seguidores".
Luego de recuperarse, enfrentó a Emmanuel Tagoe y a Fortuna, ganando por decisión unánime y nocaut, respectivamente. Sobre ese momento oscuro en su vida comentó a BBC Sports: "Supongo que cuando era niño siempre pensaba demasiado. No entendía que la ansiedad pudiera tener efectos físicos en ti, como ataques de pánico. Pasé un poco de oscuridad.
"Pero aprendí mis emociones, mis factores desencadenantes, las cosas de las que necesito alejarme. Sí, puedo tener confianza, hago un espectáculo, pero en el fondo soy la misma persona que tiene miedo y dudas como todos los demás".
¿Estadounidense o mexicano?
Ryan García es norteamericano y no habla español. El boxeo no era su única opción. Sus padres siempre han estado ahí para ayudarle en los momentos buenos y malos y para aclarar la duda que muchos tienen sobre el origen de su famoso hijo.
Henry nació en Chicago, pero sus padres son de Anahuac, Nuevo León, mientras que Lisa abrió los ojos en Nuevo México; ella dijo en entrevista con No puedes jugar boxeo, que "nosotros no cruzamos la frontera, la frontera cruzó hacía nosotros".
Sobre las críticas a su hijo por no hablar español, Henry dijo "en el boxeo, ellos saben que es mexicano. Si no habla bien, ok, ¿qué podemos hacer? Pero en el boxeo no hay idioma, nada más son golpes, y así se habla en el ring".
Rituales
No son pocos los atletas en el alto rendimiento que son propensos a los rituales. Ryan García tiene el suyo y tiene que ver con la comida.
Podría pensarse, dadas sus raíces mexicanas, que iría por el rumbo de los tacos, el guacamole o el picante, pero nada más distante. Ryan confesó a GQ Sports que tiene un ritual de alimentación una vez que da el peso para su pelea.
Según él, se sienta con su familia a degustar un Fettuccine Alfredo. "La comida italiana es mi tipo favorito. Te llena de energía".
Esa energía la necesitará el sábado para superar su primer gran reto y entrar de una vez a las grandes ligas del deporte que siendo un niño escogió porque quería que su éxito dependiera exclusivamente de él.