NUEVA YORK – Lo peor ya pasó para el inglés Michael 'Rocky' Fielding, que perdió contra Saúl 'Canelo' Álvarez por nocaut técnico en el tercer episodio de su esperada pelea por el título mundial de la AMB de las 168 libras.
Tras el combate, el de Liverpool no tenía ninguna duda de que acaba de subirse al ring con el mejor peleador del momento.
“Es el mejor. A mí me gustan mucho Golovkin, Lomachenko… y Canelo está en esa liga. Es espectacular”, aseguró Rocky. “Me quito el sombrero con Canelo. Es un gran boxeador.
“Sólo hace falta ver su récord. Es el número uno. Lo hace todo bien. Su timing, su presencia, su velocidad”, aseguró.
Desde que se anunció la pelea, los dos boxeadores se han mostrado sumamente respetuosos el uno con el otro, y era obvio que una vez hincó la rodilla en el ring, Fielding no podía hacer otra cosa más que deshacerse en elogios ante el nuevo campeón mundial en tres categorías diferentes.
La pelea fue corta y parte de la culpa la asumió el propio boxeador británico. Sabía que tenía algo de ventaja con su altura y su alcance, sin embargo, desoyó las instrucciones de la esquina y dejó que Canelo le peleara en corto. El espigado púgil cayó a la lona en cada uno de los tres rounds que duró la pelea, y tras la tercera ocasión, el juez decidió dar por concluido el combate.
“Es muy fuerte. Golpea muy duro. Me ha cazado en un par de golpes al cuerpo, de esos que te sacan el aire. Canelo tiene esa fuerza superior, de un peleador de élite, de los que hacen historia”, dijo Rocky tras la pelea.
“Empezamos a pelear en corto y creo que me equivoqué. Duré demasiado tiempo muy cerca de él y tenía que haberme retirado un poco, utilizado mejor mi altura y el alcance de mis brazos. Pero, estoy feliz de haber tenido esta oportunidad, de haber peleado con uno de los grandes. He dado lo mejor de mí mismo, pero el mejor peleador acabó ganando”.
Las apuestas daban a Canelo como claro favorito para la pelea, llegando a poner en duda lo conveniente de haber organizado esta pelea entre dos boxeadores de un nivel tan claramente dispar. 'Rocky' explicó cómo se gestó la pelea y porque aceptó enfrentarse a Canelo. Al final, aseguró que no saca más que conclusiones positivas de este combate.
“Nunca digo no a un reto y cuando recibí una llamada y me dijeron: ‘Canelo quiere pelear contigo’, no pude negarme”, confesó Fielding. “Es un boxeador de élite y yo he intentado salir ahí y hacerlo lo mejor posible. Además, he peleado en el Madison Square Garden, he pasado un semana genial en Nueva York, he conocido a gente espectacular, y he podido hacer realidad un sueño.
“Volveré aquí, no tengo dudas”, acotó el británico.
Ante el Canelo, Fielding registra sólo la segunda derrota en su carrera como profesional --la anterior fue contra Callum Smith, también por nocaut técnico, pero en el primer asalto. 'Rocky' comparó a ambos peleadores e incluso se atrevió a asegurar que sería un buen cara a cara en las 168 libras.
“Son comparables en términos de lo duro que golpean. Pero creo que es más importante fijarte en los golpes que no ves, en el momento en que se lanzan; eso es lo que hace muy bueno a Canelo. Callum, en su momento, también supo cómo manejar su ritmo para ganarme. Los dos son muy buenos y sería una buena pelea entre ellos. Canelo puede pelear con cualquiera en la categoría supermediana. Hoy lo ha demostrado”.
Sobre lo que le depara el destino tras esta derrota, el británico aseguró que su plan ahora es descansar y que, de momento, no ha hablado sobre ningún contrincante para su próxima pelea.
“He sufrido dos derrotas dolorosas, pero tengo claro que me levantaré de nuevo y volveré a pelear por un título mundial. Ya lo hice tras perder contra Callum cuando nadie apostaba por mí, y ahora lo volveré a hacer. He enfrentado al mejor peleador libra por libra del mundo, así que ahora voy a descansar y disfrutar de las fiestas. Ya el año que viene volveré al gimnasio y hablaré con Eddie [Hearn] sobre nuestros planes para las próximas peleas”, concluyó Fielding.