LAS VEGAS --- Saúl "Canelo" Álvarez tiene la responsabilidad... y lo acepta.
El campeón mundial mexicano está consciente de que los cientos de personas que esperaban verlo de cerca en la ceremonia de llegada a Las Vegas para el combate del sábado contra Daniel Jacobs, quieren verlo a él aunque sea por unos minutos.
Álvarez reconoce que la inmensa mayoría de las personas que vendrán a Las Vegas atraídos por la cartelera del fin de semana del 5 de Mayo, vienen para verlo.
Y también que un gran porcentaje de los fans que prendan televisoras, computadoras o cualquier aparato para verlo a través de las cámaras serán para verlo ganar a él.
"Es una gran motivación, pero también es una gran responsabilidad", dijo "Canelo" Álvarez, minutos después de subir al escenario frente a una gran multitud que aguardó por horas en el lobby del hotel sede de su pelea contra Jacobs.
"Así ha sido los últimos años. Pero a esto nadie se acostumbra jamás", agregó. "He trabajado mucho para llegar a este punto y mi única manera de pagarle a toda esta gente es haciendo mi trabajo arriba del ring y con mucho trabajo en el gimnasio".
Y está vez, a diferencia de sus combates anteriores en Las Vegas, la afición no se dividió. En septiembre pasado y mayo del 2017, las opiniones eran divididas entre Álvarez y Gennady Golovkin.
"Canelo Álvarez ganará sin problema", dijo Luis Acosta, quien viajó de Los Ángeles para estar únicamente en los eventos públicos que el boxeador mexicano tendrá esta semana. "Es un gran campeón y muchas veces los mismos mexicanos no reconocemos. Todos los que estamos aquí venimos para verlo a él y apoyarlo".
El propio Jacobs, de 32 años, reconoce que ni por mucho es el favorito de la afición y que buena parte de su carrera depende de la exhibición que brinde frente a Álvarez.
"Sé que aquí pocos consideran que puedo ganar y es lógico", dijo Jacobs. "Pero se van a llevar una sorpresa. Tengo las herramientas y el talento. Tuve un gran campamento y estoy listo".
"Canelo" Álvarez (51-1-2, 35 KOs) y Jacobs (35-2, 29 KOs) se miden por los campeonatos medianos del Consejo Mundial de Boxeo, Asociación Mundial y Federación Internacional.
"Va a ser una pelea complicada", consideró Álvarez. "Es un muy buen boxeador y buen rival. Sé que vendrá con todo a tratar de ganar. Es muy grande y está en su peso. Pero yo tengo lo mio, por algo estoy aquí y traigo un buen plan de pelea".
Álvarez, de 28 años, sigue convencido de que sólo tiene que preocuparse por hacer bien su trabajo, sin importar el rival de mucho, poco o regular nombre en el pugilismo y que las cosas caerán por su peso, dentro y fuera del ring.
"Quiero ser recordado como uno de los mejores en la historia del boxeo", afirmó Álvarez. "Esa es mi meta. Sé que siempre habrán críticos. Yo sólo tengo que hacer mi trabajo y brindarle el mejor boxeador que puedo ser a todos mis aficionados".