Quizás no haya una sola palabra que pueda describir lo que provocaba Orlando ‘Siri’ Salido cada vez que subía al ring. Un auténtico hombre espectáculo que en lugar de ponerse guantes cuando iba a subir al ring, se bañaba en drama para hacer que cada fanático desquitara cada dólar, o cada peso, que pagó por verle cruzar metralla. Un auténtico guerrero yaqui.
El mundo le reconoció por su entrega, su coraje, su dureza, su valentía y poder de puños. Salido (44-14-4, 31 KO) logró victorias impensables, le quitó el invicto a ‘Juanma’ López, en su casa y con su gente, y también manchó el récord de la estrella actual Vasiliy Lomachenko. Se fraguó a golpes con Francisco ‘Bandido’ Vargas en la pelea del año, y no pudo con Juan Manuel Márquez, pero al final se fue contento porque las memorias que dejó sobre el ring siempre van a superar sus números.
Con eso en mente, nos ponemos al día con la leyenda. Este es el '¿Qué fue?' de Orlando ‘Siri’ Salido.
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¿A qué se dedica actualmente Orlando Salido?
Estoy como diputado local, aquí en la ola de Andrés Manuel López Obrador (actual presidente de México), gracias a Dios quedé, aparte de lo conocido que era yo en Cajeme. Fui electo diputado y seguimos trabajando, haciendo iniciativas, reformando leyes, ahí vamos aprendiendo poco a poco. Hay muchas propuestas (para seguir en la política), pero hay que ir caminando poco a poco para empezar en lo que viene.
¿No extrañas el boxeo?
Sí lo extraño, pero me pongo a entrenar y se me quita.
¿Cómo consideras que fue tu carrera?
Empecé de la nada, queriendo escalar, queriendo ser alguien en el boxeo. Nunca tuve apoyo de nadie, lo que hice lo gané por mí mismo, me llegaron oportunidades, no las desaproveché y gracias a Dios llegué hasta donde logré. Estoy contento con lo que hice en mi carrera. Empecé a boxear buscando una oportunidad, gracias a Dios se me abrieron las puertas. La gente me reconoce porque siempre fui un guerrero sobre el ring, siempre subí a dar espectáculo, a dar pelea para el agrado de todos ellos.
¿Cuál habrá sido tu mejor noche, o la que más disfrutaste?
La (primera) de Juanma López, era el número uno de la división. Tenía todo en contra, es la que más disfruté y la que creo que más disfrutaron todos.
¿Y la que menos te gustó?
Con Mikey García, me vi muy inferior a él, tenía un problema en el ojo, no pude decir nada porque se cancelaba la pelea y a lo mejor no podía pelear porque tenía un problema en la vista. Era una catarata, luego tenía las lámparas muy abajo, no miraba nada, todo me encandilaba, no miraba ni los golpes y él andaba de blanco, me encandilaba más.
¿Cómo fue que llegaste al boxeo?
Un amigo me invitó, ‘vamos al gimnasio’, me dijo, y ahí empecé. Mi padre falleció, mi mamá se volvió a casar, se deformó mi familia, y pues no tenía nada qué hacer. La neta yo tenía que comer y empecé a boxear así sin entrenar, por eso son las pérdidas que tuve, porque iba sin prepararme, así nada más a ganar unos cuantos pesos.
¿Y mientras compaginabas el boxeo con la albañilería?
Sí, la albañilería, pero empecé vendiendo paletas, ‘La Reyna’ se llamaban, ahí empecé, también para sacar unos cuantos pesos. Luego de albañil, no estaba uno impuesto a eso, pero tenía que echarle ganas para sacar para la papa.
¿Cómo ves el boxeo actual, te gusta, lo ves diferente?
Muy cambiado, muy buenos peleadores, pero como que cuidan más a los peleadores, los van llevando. Mucha mercadotecnia y ganando gigantescas bolsas de dinero. El boxeo cambia, va evolucionando, y qué bien por ellos.
¿Crees que te alcanzó lo que hiciste para ser nominado al Salón de la Fama?
Pues no sé, ojalá quede en los Inmortales, eso se va a someter a votación. Ojalá que cuando me nominen voten por mí.