Por primera vez en mucho tiempo, vamos a tener una de esas carteleras que pueden y deben marcar un antes y un después en el boxeo
La pandemia por el COVID-19 nos quitó entre muchas otras cosas en el 2020, las grandes funciones de boxeo; después de la cartelera de Fury Vs Wilder de febrero pasado se fue apagando la actividad al grado de prácticamente desaparecer por completo.
Afortunadamente, de unos meses para acá se ha ido recuperando poco a poco la industria, primero con el esfuerzo de Bob Arum y su famosa empresa promotora Top Rank en la burbuja del MGM de Las Vegas y luego con otras empresas que se han dado a la tarea de reactivar el deporte y el negocio en términos generales.
Por primera vez en mucho tiempo, vamos a tener una de esas carteleras que pueden y deben marcar un antes y un después en el boxeo, el próximo sábado en el Mohegan Sun de Uncasville Connecticut, PBC en asociación con Showtime, montarán un espectáculo de pago por evento que parece podría indicar el ritmo de las grandes funciones del futuro.
Antes era normal poner funciones de PPV con dos o tres títulos mundiales en disputa, al más puro estilo de Don King en los años 80, lamentablemente la tendencia de los últimos tiempos era solo observar una pelea grande en el combate estelar y el resto era para exhibir a los prospectos de la empresa promotora, en detrimento del público que tenía que presenciar un espectáculo patético en donde terminaba por dominar el aburrimiento masivo y el silencio en la arena.
La gente seguía yendo y abarrotando las arenas cuando el combate era estelar, pero definitivamente comenzó a permear la terrible costumbre de llegar solo a la pelea principal, dejando vacío el recinto a manera de reclamo ante la ausencia de figuras en esas carteleras.
Por ello la importancia de la función del sábado, si bien, mucha gente se ha quejado del costo del evento (75 dólares), también es cierto que la función parece especial al presentar ¡5 peleas de título mundial!
La gente argumenta y con razón, que los tiempos no están para pagar 75 dólares por una función de boxeo, muchos han perdido sus empleos por la situación del coronavirus o han sufrido una merma en sus ingresos por la emergencia sanitaria.
Cada quien decidirá si compra o no dicha función, si vale la pena el gasto; pero al menos, ha regresado la idea de vender un mejor producto al público. El sábado veremos al filipino John Riel Casimero, campeón mundial en 3 divisiones diferentes, exponer su título mundial de peso gallo versión OMB ante el ghanés Duke Micah, un retador invicto con 24-0. Casimero está en la persecución de un combate ante el monstruo japonés Naoya Inoue, quien posee 2 títulos de los 4 posibles en la división, y que está metido en el top 5 libra por libra; Casimero no puede fallar o se le va esa pelea.
Brandon Figueroa es el campeón mundial de peso Súper gallo de la AMB y expondrá su título ante Damien Vázquez, un zurdo invicto de 23 años con marca de 15-1-1 y 8 KO, Figueroa es un joven México-americano de 23 años que viene de empatar con el “pollito” Ceja y quien busca establecerse en la división antes de enfrentar combates de unificación.
Luis Nery subirá al ring con su nueva esquina, con Eddie Reynoso, el manager del año en 2019, y buscará el título mundial Súper gallo CMB vacante ante el también mexicano Aarón Alameda. Será una pelea de zurdos, invictos donde el “Panterita” partirá como amplio favorito para coronarse en una segunda división, pues, ya lo fue en gallo.
Nery tiene todo el potencial del mundo para convertirse en una súper estrella del boxeo a sus 25 años de edad, lamentablemente sus continuos fallos en la báscula y un problema de dopaje en el pasado, han descarrilado su carrera; hoy tiene un envión diferente, la disciplina del Team Canelo, debe meterlo en cintura y explotar todo su potencial sin cambiar el estilo de uno de los peleadores más explosivos del mundo. El campeonato Súper gallo CMB quedó vacante a raíz de la lesión de Rey Vargas, quien se fracturó una pierna y fue declarado campeón en receso.
Los combates estelares del sábado estarán a cargo de los hermanos Charlo; Jermell tendrá una prueba durísima ante el noqueador dominicano Jeison Rosario quien viene de fulminar en 5 rounds a Julian Williams, quien a su vez había derrotado al campeón del mundo Jarrett Hurd en 2019. Jermell Charlo es el campeón mundial de peso súper welter CMB; será una gran pelea seguramente, dos boxeadores con tremenda pegada, un combate de esos que valen la pena, de unificación de campeones mundiales. Charlo del CMB y Rosario de la AMB y FIB en las 154 libras.
Finalmente, Jermall Charlo se verá las caras con el veterano ucraniano Sergy Derevyanchenko por el título mundial mediano del CMB. Charlo, con marca de 30-0, 22 KO y 30 años, hará la tercera defensa de su cinto que lamentablemente obtuvo de manera absoluta, una vez que el CMB hiciera la jugada del campeón “franquicia”, un invento para poder dar al retador lo que buscaba, y al campeón de seguirlo siendo, con un status más elevado. Es decir, eres un súper campeón y puedes pelear por el título de la división que quieras, cuando quieras y sin obligaciones de ningún tipo.
Como sea, la pelea es muy buena, Derevyanchenko tiene 34 años, se le acaba el tiempo; viene de dar la pelea de su vida ante Gennadiy Golovkin, a quien estuvo a punto de derrotar y antes había perdido una decisión dividida ante el magnífico Daniel Jacobs en 2018.
Esperemos que la función cumpla, que sea un gran espectáculo y que de ahora en adelante el público pueda pedir y exigir mejores carteleras cuando hay un PPV de por medio o cuando las funciones tengan alto costo de manera presencial.
Poco a poco la gente que hace negocios en el boxeo se ha dado cuenta de que, o ponen a los mejores contra los mejores o el público se irá para no regresar. El Boxeo y su audiencia, son nobles y lo han sido siempre, pero, han estirado mucho la liga.
A disfrutar, es una gran función y se pone la muestra de lo que hay que hacer para recuperar los números, la industria y el boxeo.