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Jere Ponce, por demolición

El argentino Jeremías Ponce, campeón mundial welter junior IBO, se presentó en Hamburgo y todo duró 3 minutos y 50 segundos. Tiempo más que necesario para terminar con las aspiraciones del venezolano Michel Marcano, apodado “El Gallo de oro”.

Fue el sábado 20 de noviembre, en el Universum Gym de Hamburgo. Ponce, que ahora suma 29 peleas, todas ganadas, 19 antes del límite, asumió la pelea desde el comienzo “A lo Ponce”, esto es: zurda larga en jab tirada con potencia, presión permanente, derecha en recto bien a fondo y actitud ganadora.

Se le plantó Marcano, quien ahora totaliza 22 ganadas (19 por la vía categórica) 5 derrotas y un empate. Pero no le alcanzó, porque el argentino, oriundo de Mármol, Buenos Aires, definió todo de un solo impacto, cuando transcurría el primer minuto del segundo asalto.

En un cuerpo a cuerpo, cuando empezaban a separarse, Ponce conectó un cruzado de derecho corto y de mucha fuerza sobre el flanco del venezolano quien cayó pesadamente. Y, aunque lo intentó, no logró recuperarse, quejándose de un tremendo dolor en la zona.

Se presentó otro argentino, Leandro Robutti, campeón nacional, y lo hizo frente al cubano José Larduet, quien ahora suma 7 peleas, todas ganadas antes del límite. De gran pasado amateur, terreno en el que no solamente cosechó varias medallas internacionales sino que además, efectuó unas 300 peleas, Larduet –radicado en Alemania-, no tuvo apuro ante un rival que en el primer asalto se mostró agresivo, amparándose en una izquierda lanzada con mucha fuerza.

Inútil, porque estando contra las sogas en el segundo round, Robutti recibió una tremenda combinación de manos de alta velocidad y potencia del cubano, quien terminó con la pelea de manera impecable. El argentino suma 8-5-0, con 5 nocauts. El cubano se llevó el título Latino WBC de los pesados, vacante y se mostró eficiente y definidor en el breve trámite del combate.

La velada fue televisada para toda América Latina por ESPN +, con los relatos de Carlos Irusta y los comentarios de Julius Julianis.

Ponce, por ahora, sigue esperando una posible pelea ante el campeón unificado Josh Taylor, quien deberá defender la porción WBO de su corona ante Jack Catterall, el 26 de febrero en Glasgow. Jeremías sigue ligado por ahora con Universum, de la mano de su manager Alberto Zacarías, quien no pudo viajar a Alemania. Lo hizo su hijo Patricio, que lleva ya muchos años entrenando junto a su padre. En junio pasado, Jere venció de manera indiscutible a Lewis Ritson en Newcastle, Inglaterra. Gran victoria porque se ganó el derecho a ser número uno del ranking IBF (Internacional Boxing Federation) y retador obligado de Josh Taylor.

Jeremías Ponce fue padre de Alejo en octubre pasado con su pareja, también boxeadora, Iara Altamirano. Dicen que los niños vienen con un pan debajo del brazo; en este caso, parece que Alejo trajo, además, un nocaut para seguir soñando.