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Costó, pero Helmut Marko se disculpó con Checo Pérez y los sudamericanos

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Checo Pérez tuvo que transpirar mucho para pasar a Carlos Sainz (1:10)

El mexicano atacó durante muchas vueltas al español de Ferrari, quien cubría todos los huecos, hasta que finalmente el de Red Bull impuso su poder. (1:10)

Cuando los discursos se hacen por compromiso, es difícil digerirlos como reales. A Helmut Marko, hombre fuerte dentro de Red Bull, le costó mucho encontrar las palabras para disculparse de su xenófoba declaración en la que fustigó a Checo Pérez con una frase lacerante: “Es sudamericano y no puede concentrarse tanto como Max Verstappen y Sebastian Vettel”.

Más allá de mostrar un sorprendente desconocimiento de geografía al ubicar a México en Sudamérica, Marko mostró una actitud racista desde su posición de europeo. El medio Oe24 de Austria le dio la chance de resarcirse de su comentario, pero no hizo más que meterse más en el fango: “Eso no era lo que quería decir. Me refería a que un mexicano tiene una mentalidad diferente a la de un alemán o a la de un neerlandés”. Bien, su intento de disculpa no hizo más que refrendar su condenable pensamiento inicial.

Evidentemente alguien la habrá hecho notar a Marko que solo había embarrado más la situación. Horas después de su primer intento, ServusTV emitió un comunicado, que supuestamente fue redactado por el austríaco, con el que se trató de zanjar la situación.

“Respecto a mis dichos sobre Sergio Pérez en el programa Sport und Talk de ServusTV el lunes 4 de septiembre, me gustaría disculparme por mi comentario ofensivo y quiero dejar absolutamente claro que no creo que podamos generalizar sobre personas de cualquier país, de cualquier raza o cualquier etnia. Estaba tratando de señalar que Checo ha fluctuado en su rendimiento este año, pero fue un error atribuir esto a su herencia cultural”, narró el comunicado.

Los ácidos comentarios de Marko son un clásico y parecen no tener límites. Desde Red Bull nadie salió a aclarar algo después de los dichos de su asesor y hombre que maneja el programa de desarrollo de jóvenes. Su disculpa pareció más un intento de salir del atolladero que él mismo creó que a un sincero pensamiento. Por ahora, es tema terminado. Hasta la próxima vez que hable.