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Repetición Instantánea NFL: Los 49ers sabían el riesgo que compraban en Kyle Shanahan

Un entrenador en jefe de la NFL no llega a esa posición por hacer lo que los otros quieren, llega gracias a su filosofía y, en algún sentido, gracias a su terquedad.

Cuando un equipo contrata a un nuevo coach, debe estar consciente de que, además de adquirir las virtudes, también adquiere los defectos y como sucede naturalmente, los defectos hacen más ruido en derrotas que las virtudes en las victorias.

A eso se enfrentan Kyle Shanahan y los San Francisco 49ers en el receso de temporada que inició con su derrota en el Super Bowl LIV ante los Kansas City Chiefs.

Los 49ers contrataron a Shanahan como coach por el prestigio que construyó como coordinador ofensivo en los Houston Texans (2008-09), Washington Redskins (2010-13), Cleveland Browns (2014) y Atlanta Falcons (2015-16) con ataques que terminaron entre los más productivos de la liga en varias temporadas.

Los mejores resultados de Shanahan se dieron en Atlanta, cuando ubicó a su ofensiva como la décima y segunda más productiva en sus dos campañas con los Falcons, sin embargo, es en esta etapa cuando Shanahan cometió el error que lo marcaría por el resto de su carrera.

Al contratarlo como su nuevo entrenador en jefe en 2017, los 49ers sabían que, además de su genio ofensivo, Shanahan fue el protagonista principal de uno de los colapsos más grandes en la historia de la NFL, cuando los Falcons dejaron escapar una ventaja de 25 puntos en el tercer cuarto del Super Bowl LI para finalmente perder 38-24 en tiempo extra ante los New England Patriots.

En ese encuentro, Shanahan decidió mantener activo su juego aéreo, lanzar cuando no era necesario, y no correr más para limitar el margen de reacción de los Patriots.

Los 49ers confiaron en Shanahan, pero Shanahan ya había demostrado que es lo que es y otra ventaja perdida en el Super Bowl LIV sólo lo confirmó.

Al parecer, Shanahan entra en pánico justo en el momento en el que debe dar el tiro de gracia al rival. Ante los Chiefs, luego de la segunda intercepción de su defensiva a Patrick Mahomes, la ofensiva de los 49ers simplemente hicieron a un lado el mejor aspecto de su ataque: la carrera.

Raheem Mostert promedió 4.8 yardas en 12 carreras y Tevin Coleman 5.6 en cinco, como equipo, los 49ers promediaron 6.4 yardas cada vez que corrían, es decir, tenían en serios problemas a la línea defensiva de los Chiefs, sin embargo, Shanahan parece haber caído en pánico cuando Kansas City se acercó 20-17 en el marcador con 6:13 por jugar en el cuarto periodo.

En el siguiente ataque de San Francisco, Mostert corrió para cinco yardas en primera oportunidad y en lugar de volver a atacar por tierra con alta probabilidad de ganar varias yardas u otro primero y 10, los 49ers lanzaron dos pases incompletos y tuvieron que despejar tras restarle sólo un minuto y dos segundos al reloj.

Los Chiefs anotaron, se fueron arriba 24-20 con 2:44 en el reloj y los 49ers abrieron su siguiente serie con una carrera de 17 yardas de Mostert. Era claro que la línea defensiva de Kansas City no podía frenar al ataque terrestre de San Francisco, pero un castigo que puso al ataque gambusino en primera y 15 terminó por enfilar a los 49ers al colapso y a Shanahan a la infamia.

A partir de ese momento, los 49ers sólo se dedicaron a lanzar, al mismo tiempo, la defensiva de los Chiefs aumentó la presión a Jimmy Garoppolo y las últimas dos series ofensivas de San Francisco terminaron en cuarta oportunidad y 10 al medio campo y en intercepción.

Shanahan es lo que es. Un coach que no sabe cómo reaccionar ante la adversidad, aunque tenga todo a favor. Los 49ers lo sabían, pero lo confirmaron de la peor forma y en el peor momento.

Andy Reid exorciza sus demonios
Del otro lado de la moneda está Andy Reid, quien tras derrotas agonizantes y dolorosas a lo largo de su carrera como entrenador en jefe de los Philadelphia Eagles y Chiefs, aprendió a no cometer los mismos errores rumbo al Super Bowl LIV y en el duelo ante los 49ers.

De hecho, los tres primeros cuartos y medio de los Chiefs ante los 49ers fueron un recuerdo del viejo Reid, ese estratega que, como sucede actualmente con Shanahan, no sabía cómo administrar los tiempos de un juego.

Reid perdió el Super Bowl XXXIX con los Eagles tras caer en una situación adversa prácticamente idéntica a la que experimentó en la edición LIV, cuando los Chiefs perdían por 10 puntos con 8:53 por jugar.

En el Super Bowl XXXIX, los Eagles perdían también por 10 puntos y sólo anotaron una vez en sus últimos tres ataques. La única serie en la que anotaron duró 3:52 minutos. Ante los 49ers, 15 años después, los Chiefs anotaron sus últimas tres series ofensivas sin contar la última en la que Patrick Mahomes se arrodilló cuatro veces, y esos ataques duraron 2:42 minutos, 2:26 y 13 segundos.

En el Juego de Comodines de la AFC de la temporada 2013, los Chiefs se fueron arriba 38-10 en el tercer cuarto, pero Reid le permitió a los Indianapolis Colts remontar, luego de no abandonar el juego aéreo y dejarle tiempo al rival para reaccionar. Al final, los Chiefs perdieron 45-44.

En la misma ronda, pero en la temporada 2017, lo mismo: los Chiefs tomaron ventaja de 21-3 sobre los Tennessee Titans, pero perdieron 22-21 por la incapacidad de Reid de manejar el ritmo del encuentro.

Estos son sólo dos ejemplos de los duros golpes que llevaron a Reid a convencerse de dar el tiro de gracia al rival, ya sea sin quitar el pie del acelerador, como lo hizo ante los Houston Texans en la Ronda Divisional, luego de que Kansas City se fue abajo 24-0 en el segundo cuarto, o con balance en su ataque, como lo hizo ante los Titans en el Juego de Campeonato de la AFC.

Le tomó 21 años, pero Reid finalmente coronó su carrera como coach con una victoria en el Super Bowl y lo hizo gracias a la madurez que le hizo hacer a un lado la terquedad que lo hizo sufrir varios fracasos en Playoffs.

Steve Spagnuolo, el héroe desconocido
¿Recuerdan quién era el coordinador defensivo de los New York Giants cuando le quitaron el invicto a los Patriots en el Super Bowl XLII?

Steve Spagnuolo ha hecho los mejores trabajos de su carrera como coordinador, el más reciente, con los Chiefs, equipo que en 2019 sólo necesitaba un pequeño ajuste a la defensiva para dar el salto hacia el título de la NFL.

Una vez que la defensiva de Kansas City, en particular la línea frontal, presionó más a Garoppolo, la ofensiva de los 49ers se descompuso.

Aunque Shanahan ayudó un poco a descomponer a su ataque al abandonar la carrera, el mérito de Spagnuolo es detectar el momento preciso para enviar cargas. Si no las manda, ahora lo criticaríamos por no hacerlo.

Hace 12 años, cuando era coordinador defensivo de los Giants, Spagnuolo hizo algo similar, sólo que lo hizo durante todo el Super Bowl XLII. Presionó a Tom Brady en todo momento para evitar que el entonces explosivo ataque de los Patriots entrara en ritmo y conocemos el resto de la historia.

Tras dos temporadas de muy bajo desempeño, entre los peores de la NFL, la defensiva de los Chiefs no necesitaba ser de las mejores, sólo mejorar ligeramente para respaldar a su ofensiva y así sucedió y el responsable de esto es Spagnuolo.

Con este análisis damos por concluida la Repetición Instantánea de la temporada 2019-20. Agradezco su interés por seguir estos análisis durante 21 semanas.

Tenemos una cita para los días previos a la Semana 1 de la campaña 2020-21 o antes si surge algo relevante.