No son semanas nada fáciles para Nicolás Jarry (24° ATP), quien parece haber perdido el rumbo momentáneamente. El chileno, sumó, ante Tomás Etcheverry (38°) y en el Masters 1000 de Montreal, su quinta derrota al hilo, con el agregado de que cuatro de ellas fueron en la primera ronda de un torneo.
Lejos parece haber quedado el superlativo nivel que llevó al chileno a la final del Masters 1000 de Roma a finales de mayo. En dicho torneo, venció a jugadores de la talla de Stefanos Tstisipas (11°) y Tommy Paul (12°), antes de caer con Alexander Zverev (4°) en el duelo decisivo.
Desafortunadamente para él, no pudo trasladar su buena actuación en la capital italiana hacia el resto de los torneos y encadenó una racha adversa, que no le permitió pasar el estreno en Roland Garros y Wimbledon. En el Grand Slam parisino sucumbió ante el francés Corentin Moutet (67°), mientras que en La Catedral no pudo con el canadiense Denis Shapovalov (106°).
Se profundizó la situación en los Juegos Olímpicos, donde fue superado de manera inesperada por Alexei Popyrin (62°) en el debut. Finalmente, tal como se mencionó, la quinta derrota consecutiva llegó en tierras canadienses y fue a manos de Etcheverry.