Juan Manuel Cerúndolo (126º del mundo) no pudo agotar las pilas del robot Daniil Medvedev (10º) y se despidió del Madrid Open con un sabor alegre y nuevas experiencias. El ruso le mostró la puerta de salida con parciales de 6-2 y 6-2 después de una hora y dos minutos de juego.
El tenista moscovita, campeón de Grand Slam y ex 1º del mundo, impuso condiciones desde el minuto cero y expuso sus sólidos argumentos tenísticos para conseguir el boleto a los octavos de final por la vía rápida, marcando el final del camino para el porteño de 23 años, hermano menor de Francisco, quien hizo su debut absoluto en el cuadro principal de la Caja Mágica e igualó su mejor marca en Masters 1000, lograda en Miami, en 2022.
El pupilo de Sebastián Prieto jugó apenas su cuarto main draw en eventos de esta categoría y dejó su huella a raíz de espectaculares victorias desde la fase previa ante jugadores de renombre, para luego batir en primera ronda al estadounidense Aleksandar Kovacevic (77º) y en segunda fase al nada menos que finalista de la edición pasada, Felix Auger Aliassime (19º), configurando de este modo el gran cimbronazo de su carrera.
Cabe mencionar que este fue el segundo M1000 sobre polvo de ladrillo en la vida deportiva del campeón del ATP 250 de Córdoba 2021, que solo había participado en el foro itálico de Roma, en 2023, donde fue eliminado en el estreno por el francés Arthur Fils.
Por su parte, el dueño de 20 trofeos ATP, que obtuvo bye en el debut del evento por su condición de preclasificado y avanzó a tercera ronda sin jugar por la baja del serbio Laslo Djere, se medirá por un puesto en cuartos de final con el estadounidense Brandon Nakashima (32º).