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Segunda apertura de una serie es el verdadero problema de postemporada de Clayton Kershaw

La narrativa recorre cada octubre, la constante que conecta cada postemporada con la anterior durante los últimos ocho años, con muchos de los giros y vueltas horribles de una novela de Stephen King. ¿Clayton Kershaw, el mejor lanzador de su generación, finalmente podrá celebrar un título de Serie Mundial con sus compañeros de equipo?

Kershaw está de regreso en la lomita para el quinto juego del domingo con la oportunidad de poner a Los Angeles Dodgers nuevamente en la cima después de la última derrota del sábado por la noche. Ha sido efectivo esta postemporada, con un juego de 13 ponches contra los Brewers en la ronda de comodines y una efectividad de 2.88 en cuatro aperturas. Sin embargo, su única salida complicada fue crucial; en el Juego 4 de la Serie de Campeonato de la Liga Nacional, cedió cuatro carreras en cinco entradas cuando L.A. cayó al borde de la eliminación antes de remontar para ganar los últimos tres juegos. Quizás sea notable que Kershaw no lanzó en ninguna de esas tres victorias. Walker Buehler ahora es considerado el as de los Dodgers, y Kershaw no tiene que ganar todos los juegos, como se esperaba, injustamente, durante tantos años. Sigue siendo uno de los jugadores más valiosos del roster, pero los Dodgers tienen muchos jugadores valiosos.

Sin embargo, eso no hace que una apertura de Kershaw esté menos llena de intriga. Sospecho que incluso si no eres un fanático de los Dodgers, te encuentras tirando de Kershaw en esta época del año. En su carrera en la temporada regular, tiene 175-76 con efectividad de 2.43. En su carrera en la postemporada, tiene marca de 12-12 con efectividad de 4.22. Vi una lista similar a la de abajo en una transmisión reciente. Desde la llegada del comodín en 1995, Kershaw tiene la quinta peor efectividad de postemporada entre los lanzadores con al menos 70 entradas:

David Price: 4.62
Charles Nagy: 4.46
Al Leiter: 4.38
CC Sabathia: 4.28
Clayton Kershaw: 4.22
Zack Greinke: 4.22

Eso es de 36 lanzadores. Mariano Rivera encabeza la lista, con Madison Bumgarner segundo y Curt Schilling tercero. Lo que hace que la clasificación anterior se destaque aún más, por supuesto, es la diferencia entre esa efectividad de postemporada y la efectividad de carrera del jugador:

Price: +1.31
Nagy: -0.05
Leiter: +0.58
Sabathia: +0.54
Kershaw: +1.79
Greinke: +0.85

Kershaw ha sido tan dominante en la temporada regular, que ha hecho que sus resultados en los playoffs sean más frustrantes. Además de eso, está sujeto a un estándar imposible. Se espera que duplique las actuaciones heroicas de leyendas de la Serie Mundial como Sandy Koufax y Bob Gibson, a quién le importa si lanzaron en una época diferente y tuvieron que lanzar solo en una serie por año, o igualar una carrera de octubre como su contemporáneo y rival Bumgarner tuvo para los Giants en 2014.

La salida del domingo por la noche será una gran prueba para Kershaw por otra razón clave: es la primera vez en esta postemporada que hará una segunda apertura en una serie. Tenía la teoría de que la mayoría de los problemas de postemporada de Kershaw se produjeron la segunda vez que enfrentó a un equipo en una serie. Antes de poner la teoría en papel, verifiqué los números. Regresé a 2013, la primera postemporada que Kershaw lanzó después de convertirse en el mejor lanzador del juego.

Primer juego de una serie: 102⅔ IP, 78 H, 44 R, 42 ER, 23 BB, 118 SO, 14 HR, 3.15 ERA
Apariciones posteriores: 65⅓ IP, 55 H, 37 R, 34 ER, 16 BB, 72 SO, 11 HR, 5.44 ERA

Entonces la teoría es válida. Los principales problemas de Kershaw se han presentado en su mayoría en la segunda apertura. Una cosa que he escuchado decir a la gente es que Kershaw ha sido presionado duro en la postemporada, lanzando con tres días de descanso en ocasiones antes en esta carrera, además de hacer varias apariciones de relevo en el camino. Es verdad; Don Mattingly y luego Dave Roberts lo presionaron con fuerza. El problema con esa teoría es que Kershaw realmente lanzó bien con un breve descanso. Ha hecho cuatro aperturas con tres días de descanso, todas en el Juego 4 de una serie divisional y su segunda apertura de una serie:

2013 SDLN vs. Braves: 6 IP, 0 ER, 6 SO
2014 SDLN vs. Cardinals: 6 IP, 3 ER, 9 SO
2015 SDLN vs. Mets: 7 IP, 1 ER, 8 SO
2016 SDLN vs. Nationals: 6.2 IP, 5 ER, 11 SO

Esa es una efectividad de 3.16, e incluso el juego contra los Nationals es un poco engañoso. Se fue en la séptima entrada con dos outs y las bases llenas, pero el bullpen permitió que los tres corredores anotaran. Ese fue el año en que llegó a conseguir los dos últimos outs en el Juego 5 para salvar. Luego comenzó el Juego 2 de la SCLN con dos días de descanso (o cuatro días de descanso después de su inicio en el Juego 4). ¿Sabes que? Lanzó siete entradas en blanco contra los Cubs. Fue en su segunda apertura de la serie, en el Juego 6, cuando los Cubs lo derribaron con dos jonrones y cinco carreras en cinco entradas.

Así que realmente no sostiene que un breve descanso haya lastimado a Kershaw. Ahora, claro, tal vez haya un efecto acumulativo aquí. Tal vez estaba agotado cuando se enfrentó a los Cubs en el Juego 6. Me sigo preguntando si ver a Kershaw por segunda vez en poco tiempo ayuda a los oponentes. Parte del misterio de enfrentar a Kershaw es que no se parece a ningún otro lanzador con esa vacilación y su windup y la entrega exagerada por encima del brazo. Tal vez la familiaridad de verlo nuevamente unos días después ayude, similar a cómo los números ofensivos saltan por tercera vez en el orden (parte de eso es la fatiga del lanzador, pero parte de eso es que los bateadores ya han visto al lanzador durante dos turnos al bate).

Regresé a la postemporada de 2015 y verifiqué los números de los abridores para su primera apertura en una serie y luego su segunda apertura. Esto dio una lista de 80 lanzadores (y 81 segundas aperturas, ya que Corey Kluber abrió tres veces en la Serie Mundial 2016).

Primera salida: 444⅓ IP, 344 H, 160 R, 153 ER, 148 BB, 454 SO, 51 HR, 3.12 ERA
Segunda salida: 399⅓ IP, 338 H, 181 R, 168 ER, 138 BB, 434 SO, 61 HR, 3.79 ERA

Entonces, sí, a los lanzadores no les va tan bien la segunda vez en una serie. Su promedio de entradas lanzadas va de 5.6 a 4.9. Sus jonrones por cada nueve entradas van de 1.03 a 1.37. Su efectividad aumenta 0.67 carreras, pero la efectividad de Kershaw aumenta 2.29 carreras.

Cabe señalar que Kershaw no ha lanzado tan mal como sugiere su efectividad. Compare sus números de la segunda apertura con las otras 81 aperturas en nueve entradas:

Kershaw: 7.6 H, 2.2 BB, 9.9 SO, 1.52 HR, 5.44 ERA
Otras: 7.6 H, 3.1 BB, 9.8 SO, 1.37 HR, 3.79 ERA

Sus números brutos son básicamente los mismos que los del grupo de control, excepto el ERA. Por alguna razón, sus carreras en la postemporada con demasiada frecuencia vienen en números torcidos o en una mala entrada.

De todos modos, los Dodgers lo saben. Roberts no le permitirá ir demasiado tiempo y los Dodgers tienen muchos brazos en el bullpen. En sus cuatro aperturas esta postemporada, Kershaw ha lanzado 93, 87, 87 y 78 lanzamientos. Lanzará con cuatro días de descanso. Permitió solo dos hits en seis entradas en la victoria del Juego 1 sobre los Rays. Todas las señales apuntan a otro buen comienzo. Yo espero que sí.