La compañía estadounidense Top Rank espera que la tercera sea la vencida entre José Ramírez, doble campeón mundial de peso Superligero, y el excampeón Viktor ‘Iceman’ Postol, quienes se enfrentarán el próximo 29 de agosto en La Burbuja del MGM Grand de Las Vegas, en una batalla que será transmitida por ESPN+ para el territorio estadounidense.
La pelea se iba a realizar el pasado 2 de febrero en China, después el 9 de mayo en California, y ahora será finalmente en Nevada, donde Top Rank ha realizado ya algunas carteleras sin público y bajo estrictas medidas para prevenir el contagio de coronavirus. En la batalla coestelar, anunciaron, Arnold Barboza Jr. se verá las caras con Tony Luis.
"José se ha mantenido en el gimnasio con su gran entrenador, Robert García, durante toda la pandemia”, dijo el promotor Bob Arum. “No tengo dudas de que veremos la mejor versión de José Ramírez, un joven maravilloso y uno de los mejores peleadores del mundo. Tendrá que estar listo porque Postol es un contendiente digno que ha demostrado su valía en el nivel de clase mundial”, destacó el neoyorquino.
Ramírez (25-0, 17 Ko’s) volverá al ring por primera vez en 13 meses, después de haber unificado los títulos de peso Superligero del Consejo Mundial de Boxeo y Organización Mundial de Boxeo doblegando a Maurice Hooker en un emotivo combate. Postol es el retador obligatorio que le impuso el CMB, así que estará haciendo su pelea obligatoria.
“Estoy emocionado de finalmente estar de regreso. Siempre es un honor subir al ring y defender mis cinturones ante un tipo como Postol”, dijo Ramírez. “Dios sabe que mi objetivo es convertirme en el campeón indiscutible, y esta pelea me acercará a mi objetivo”, añadió respecto a una batalla unificatoria contra Josh Taylor, quien también pelea para Top Rank.
Postol (31-2, 12 Ko’s) ya sabe lo que es ser campeón del mundo cuando derrotó al argentino Lucas Matthysse en 2015; sin embargo, el gusto le duró muy poco porque Terence Crawford le quitó la faja apenas unos meses después. Ahora ante Ramírez, sabe que la pelea será muy dura, pero con 36 años de edad, puede ser su última oportunidad de coronarse.
“Estoy ansioso por pelear. Voy a ganar esos títulos mundiales. He estado entrenando desde que esta pelea se anunció por primera vez, así que estoy concentrado y listo para comenzar”, indicó el ucraniano, quien tiene marca de tres victorias y sólo una derrota en sus últimas cuatro salidas al ensogado.