La primera ronda de Roland Garros, segundo Major del calendario, arrojó un cruce con historia. Stan Wawrinka (98º ATP) se midió con Andy Murray (75º) y se impuso por 6-4, 6-4 y 6-2 en dos horas y 19 minutos de juego. Tras el éxito, el suizo habló en conferencia de prensa y afirmó sentir "emoción".
Es que este enfrentamiento entre dos campeones de Grand Slam, en el ocaso de sus vidas deportivas, significó el 23 en sus carreras y el cuarto en la prestigiosa cita parisina (el británico lidera el h2h por 13-11). Así, el hombre de Lausana, de 39 años de edad, sostuvo: "Fue emotivo, sin duda. Nos estamos acercando al final y jugamos muchas veces en los últimos 20 años".
"Sentí mucha emoción. Fue increíble estar en la sesión nocturna del estadio Philippe Chatrier, algo que nunca tuve la oportunidad de hacer. Y sí, él es un tipo increíble, un jugador increíble, un gran luchador. Tenemos un mucho respeto el uno por el otro", aseveró el ex 3º del mundo y ganador del Abierto de Australia 2014, Roland Garros 2025 y US Open 2016.
Además, Wawrinka, que buscará ante el británico Cameron Norrie (33°) o el ruso Pavel Kotov (56°) sacar boleto hacia tercera ronda por 13° oportunidad en el polvo de ladrillo francés, se mostró feliz por su rendimiento y por las condiciones de juego. "Creo que jugué mi mejor partido del año. Me sentí bien, con mucho movimiento y agresividad", dijo el campeón de 16 títulos ATP, que al finalizar el encuentro protagonizó un lindo intercambio de palabras en la red con el ex 1º del ordenamiento.
Por su parte, Murray, reconoció el buen papel del suizo y confesó sentirse frustrado por su nivel. "Estoy decepcionado, sabía que iba a ser un partido complicado. Stan ha jugado un tenis brillante en esa superficie a lo largo de los años. Me esperaba que jugara muy bien y es lo que ha hecho, me ha dado muy pocas oportunidades. Tampoco tenía las expectativas muy altas teniendo en cuenta cómo ha sido la preparación. Me hubiera gustado hacerlo mejor esta noche".