Alejado de su nivel habitual en el último tiempo, el tenista chileno Nicolás Jarry (34°) volvió a sonreír este martes, cuando firmó una remontada emocionante al salvar un match point y vencer 2-6, 6-4 y 7-6 (7) al invitado local Elias Ymer (252°) en primera ronda del ATP 250 de Estocolmo.
Producto de una infección de oído, el potente santiaguino, de 28 años, había bajado considerablemente su desempeño en los pasados cinco meses al registrar tan solo un triunfo, racha que sueña con dejar a un lado en el cemento sueco, donde mostró una cara renovada al venir de abajo, batallar en el tie-break del tercer set y sacar boleto hacia octavos de final, totalizando ocho aces, 74% de puntos ganados con su primer servicio y dos roturas concretadas en 145 minutos de pleito.
En consecuencia, el dueño de tres títulos, que optó por bajarse de Queen's, Gstaad y Kitzbuhel para participar como abanderado en los Juegos Olímpicos de París 2024, recibió una bocanada de aire fresco y una inyección anímica de cara al cierre de la temporada, en la cual totaliza 18 éxitos y 21 caídas, destacándose las finales en el ATP 250 de Buenos y el Masters 1000 de Roma.
En la próxima instancia, el ex número 16 del mundo enfrentará al serbio Miomir Kecmanovic (55°), quien festejó versus el británico Cameron Norrie (52°) en sets corridos, rival al que superó en el único antecedente entre sí, en el estreno del Abierto de Australia 2023.