Lo de Daniil Medvedev no es particularmente destacado en lo que va del año. Sin títulos y con un magro 18-11 como récord, para apenas destacarse con unas semis en el ATP 250 de Marsella y el Masters 1000 de Indian Wells, piensa que su tenis volverá a florecer de la mano de una generación "frenada".
Si Carlos Alcaraz y Jannik Sinner son el presente y el Big 3 es el pasado más exitoso, los ´90 (donde se encuentra junto a Alexander Zverev y Stefanos Tsitsipas, por ejemplo) son un punto medio detenido en el tiempo.
"No somos tan buenos como Federer, Nadal, Djokovic o Murray, y aún no tan buenos como Sinner y Alcaraz. Pero estoy seguro de que nuestra generación ganará más títulos de Grand Slam", confesó el número 11 del mundo que tiene mucho por replantearse. Más allá del dilema generacional.
Con la llegada de la temporada de césped su tenis se sienta más cómodo. Pero si busca seguir en la elite deberá esforzarse para trasladar su mejor nivel, independientemente, se juegue en superficie lenta o rápida. De eso se trata.