Dmitry Bivol llegó a Las Vegas en mayo pasado como una atracción secundaria, casi imperceptible. "El Show de Canelo Álvarez" estaba en la ciudad y atraía toda la atención.
Bivol era el campeón de peso semipesado de la Asociación Mundial de Boxeo (AMB), y Álvarez, la principal estrella del boxeo, ya tenía un acuerdo para enfrentar a Gennadiy Golovkin en septiembre por tercera vez, una vez que se encargara de Bivol, un desfavorecido en las apuestas a razón de 4-1.
Resultó que el resultado fue dominante, pero de una manera sorprendente, ya que Bivol demostró por qué los mejores boxeadores del deporte lo habían evitado desesperadamente durante años. Bivol se apropió de una decisión unánime sobre Álvarez, entonces el rey libra por libra, y arruinó los planes para la tercera súper pelea con GGG, o eso pensó Bivol.
Mientras aún estaba en el ring celebrando su victoria sobre Álvarez, Bivol (20-0, 11 KOs) le dijo al promotor Eddie Hearn: "Lamento haber roto tus planes con Gennadiy Golovkin".
Pero en lugar de ejercer su cláusula de revancha y enfrentarse a una segunda pelea consecutiva con Bivol, Álvarez optó por enfrentarse a GGG en la pelea de la trilogía, y esa decisión prevaleció.
Bivol, mientras tanto, se quedó para intentar asegurar los honores de peleador del año el sábado en Abu Dhabi, Emiratos Árabes Unidos, cuando arriesga su título de peso semipesado de la AMB contra Gilberto Ramírez (DAZN, 1:30 p.m. ET).
Un enfrentamiento con "Zurdo" Ramírez, uno de los principales contendientes de peso semipesado y ex campeón de peso súper mediano, es una pelea intrigante para Bivol. Pero una pelea contra un púgil con un perfil relativamente bajo en el Medio Oriente, mientras que él para todavía está muy lejos la revancha en Las Vegas con Álvarez, la estrella más grande del deporte.
Aun así, Bivol debería tener una amplia oportunidad de convertir la victoria sobre Álvarez en peleas más grandes, de acorde con su nuevo estatus, especialmente si puede manejar de manera convincente a Ramírez, un oponente formidable.
"Me siento más confiado porque le gané a Canelo", dijo Bivol, de 31 años, a ESPN el mes pasado.
La victoria que cambió la vida también acercó a Bivol un paso más a su sueño.
"Quiero ser campeón indiscutible, ¿sabes?" él dijo. "No importa contra quién".
En este momento, los otros tres títulos de las 175 libras están en manos de su compatriota Artur Beterbiev, un peligroso golpeador que es el único campeón de boxeo con un porcentaje de nocaut del 100%. Al igual que Bivol, Beterbiev está en la lista libra por libra de ESPN (Beterbiev es el No. 7; Bivol es el No. 8), y Beterbiev también es el peso semipesado No. 1 de ESPN (Bivol es el No. 2).
No hay enfrentamiento más grande para Bivol que Beterbiev, pero cuando agregas el campeonato indiscutible, la pelea alcanza un nivel completamente nuevo. Sería el bis perfecto para Bivol el próximo año: un enfrentamiento digno de un hombre que derrotó a Álvarez, el mejor peleador de todo el boxeo.
Es difícil exagerar cuán impresionante fue la victoria de Bivol sobre Álvarez. Álvarez parecía invencible al ingresar al enfrentamiento y, como prueba, no mire más allá de las probabilidades. Bivol ha sido reconocido durante mucho tiempo como un talento de élite, pero Álvarez estaba en una racha tan buena que la mayoría de los observadores y fanáticos le dieron pocas oportunidades a Bivol.
Desde la derrota de Álvarez ante Floyd Mayweather en 2013 cuando tenía 23 años, no había perdido una sola pelea hasta que conoció a Bivol. Y además de los dos combates anteriores contra GGG, Álvarez ni siquiera había perdido muchos asaltos.
Pero contra Bivol, Álvarez no tuvo respuesta alguna. Las tarjetas de puntuación oficiales fueron increíblemente generosas a favor del mexicano, con los tres jueces puntuando la pelea 115-113, lo que significa que Álvarez ganó cinco asaltos. En realidad, se puede argumentar que Álvarez ganó solo dos o tres rondas.
Bivol usó su excelente jab, uno de los mejores en el deporte, un extraño sentido del alcance y, lo más sorprendente, combinaciones de cinco y seis golpes no solo para confundir a Álvarez, sino también para castigarlo.
"Quería avanzar para estar cerca de él y golpearlo para que ser un poco más agresivo", dijo Bivol. "Un [estilo] un poco más agresivo".
La forma en que Bivol pudo dar golpes en grupos mientras estaba parado justo en frente de un gran peleador defensivo fue impresionante. También fue entretenido, una marcada desviación del estilo de pelea habitual de Bivol.
En sus tres peleas anteriores antes del enfrentamiento con Álvarez, Bivol obtuvo victorias en 12 asaltos sobre boxeadores mucho menores en Umar Salamov, Craig Richards y Gilbert Castillo Rivera. En esas actuaciones, Bivol boxeaba con cuidado desde el exterior, haciendo que los combates no fueran estéticamente agradables.
Pero frente a uno de los pegadores más imponentes del deporte, Bivol eligió cambiar.
La forma en que ganó despertó la sed de una cumbre con Beterbiev. Es una pelea que estaba prevista para la primavera pasada en la ciudad de residencia de Bivol, San Petersburgo, Rusia, según su mánager, Vadim Kornilov. Cuando se presentó la oportunidad de Álvarez para Bivol, Beterbiev avanzó rápidamente para anotarse un nocaut técnico en el segundo asalto sobre Joe Smith Jr., para agregar un tercer cinturón.
Y ahora que Beterbiev se recuperó de una cirugía en la rodilla derecha, está programado para defender su campeonato unificado contra Anthony Yarde en enero. Suponiendo que Beterbiev gane, como se speraa, hay optimismo de que se pueda llegar a un acuerdo para enfrentar a Bivol contra Beterbiev más adelante en 2023 en una de las mejores peleas que el boxeo puede ofrecer.
"Mucha más gente me reconoce y me detiene, se toma una foto conmigo", dijo Bivol sobre su nueva fama.
Dijo Kornilov: "Regresó a Los Ángeles para pasear un poco... va a cualquier tienda o restaurante, mucha gente de América Latina, mexicanos, todas estas personas lo reconocen y le muestran respeto, lo cual es genial. Estos muchachos saben de qué se trata el boxeo, saben lo que significa vencer a alguien como Canelo.
"Creo que la gente se da cuenta de que probablemente sea uno de los peleadores más grandes de Rusia. Pero además de eso, tiene una base de fans en [Corea del Sur] [la madre de Bivol es coreana]. Sé que Corea [del Sur] va a transmitir su pelea en vivo con Ramírez. Tiene una gran base de fanáticos en Kirguistán [donde nació]. Recién él vino del campamento allí".
Bivol tiene la oportunidad de elevar aún más su creciente perfil internacional si puede derrotar a Ramírez, otro mexicano, de la misma manera que despachó a Álvarez.
Ramírez (44-0, 30 KOs) no enfrentó grandes nombres durante su reinado del título de las 168 libras (2016 a 2018), pero se anotó detenciones en sus cinco peleas por en las 175 libras y permanece invicto.
"No puedo esperar para demostrarles a todos y a mí mismo que puedo hacer esto", dijo Ramírez, de 31 años. "Bivol es un tipo duro. Es un desafío realmente bueno. Pero voy a vengar a los mexicanos dado que el venció a Canelo".
Si Bivol derrota al "Zurdo", el peso semipesado No. 3 de ESPN, esa victoria debería conducirle al premio de Peleador del Año en una campaña en la que pocos boxeadores de primer nivel compitieron dos veces.
"Tengo mucha experiencia, [pero] ni siquiera es una experiencia de boxeo, es también una experiencia de vida", dijo Bivol sobre el enfrentamiento con Álvarez. "La gente habla mal de ti. Incluso la gente no cree en ti. Tienes que seguir adelante, creer en ti mismo, entrenar, concentrarte".
Ahora, Bivol está listo para cobrar. Y ya aseguró una cosa: nunca más seré una atracción secundaria en ninguna pelea.
