Dak Prescott reconoció que las expectativas creadas para esta campaña alrededor de los Dallas Cowboys son altas, pero, aseguró que el equipo no jugará presionado ante ellas.
“Tenemos las expectativas más altas que nunca y eso no significa presión. La presión es algo que te creas a ti mismo“, afirmó Prescott, de 25 años. “Si te enfocas en lo que puedes hacer y en lo que puedes controlar, la presión se va por la ventana“.
Los Cowboys no llegan a un Super Bowl desde que ganaron la edición XXX, pero con el dúo formado por Prescott y el corredor Ezekiel Elliott, reclutados en las primera y cuarta rondas del draft de 2016, respectivamente, han progresado tras ganar dos campeonatos divisionales en las últimas tres temporadas.
Prescott destacó que no caer víctima de la presión es resultado de encargarse de los pequeños detalles, desde la ejecución en el campo de entrenamiento, juntas, sesiones de video, gimnasio, cuidado nutricional, cenas de equipo, así como el enfoque en la vida fuera de las instalaciones de los Cowboys.
“Cuando te pones esa estrella (en el casco), sabes que toda la atención estará sobre ti”, dijo Prescott. “Sabes que cuando las cosas van mal, todas las críticas irán sobre ti y que cuando andan bien, te darán demasiado crédito”.
Durante julio, antes del inicio del campamento de entrenamiento, Prescott y la mayoría de sus receptores entrenaron juntos por su cuenta en San Diego, de manera voluntaria, para llegar lo más afinados posibles a la pretemporada, mencionó el propio quarterback.
Como han hecho desde 2004, los Cowboys tendrán la mayor porción de su campamento de entrenamiento en Oxnard, California. El 10 de agosto tendrán su primer juego de pretemporada, de visita ante los San Francisco 49ers, y el 15 viajarán a Honolulu, Hawaii, para su segundo juego, el 17 de agosto, ante Los Angeles Rams, equipo que los eliminó en la Ronda Divisional de Playoffs la campaña pasada.
El próximo domingo, los Cowboys sostendrán su partido interescuadras de calificación, el tradicional “Azul y Blanco”.
El consejo de Prescott para todos los jóvenes que llegan al campamento cargados de talento e ilusiones, y para algunos veteranos suplentes, es que todos los días se preparen como si fueran a ser titulares, porque nunca saben en qué momento llegará la oportunidad y hay que aprovecharla.
En 2016, Prescott llegó a su primer campamento de entrenamiento de novato como el tercer quarterback y abrió como titular desde el primer partido de esa misma temporada, luego de que Tony Romo y Kellen Moore quedaran fuera de acción por lesiones. Desde ese momento, ha iniciado todos los partidos.
“Soy el ejemplo más claro de que hay que estar preparado para cuando llegue el momento”, sentenció Prescott.