A los 14 años de edad y poco después de la muerte de su padre Eduardo, Juan Alfredo Wright dejó su Guayaquil natal y viajó rumbo a Lima junto a su madre y sus hermanos. Esa travesía fue el hecho que años más tarde hizo posible la llegada del fútbol al Ecuador, a finales del siglo XIX.
Es que en la capital peruana el joven Wright se unió a las filas del aristocrático Cricket & Football Club, donde ya se practicaba el juego que había traído el peruano Alejandro Garland tras culminar parte de su educación en Inglaterra. Cuando regresaron a su país cinco años más tarde, los hermanos Wright ya eran aficionados entusiastas y trajeron con ellos un balón importado desde Londres, el primero que picó en suelo ecuatoriano.
Antepasado de Thomas Charles Wright, irlandés héroe de la independencia sudamericana y fundador de la armada ecuatoriana, Juan Alfredo tenía sangre revolucionaria en sus venas. Por eso, no tardó en juntar voluntades para fundar el primer club de fútbol de su país. Fue el 23 de abril de 1899, en el local del Colegio Olmedo, cuando nació el Club Sport Guayaquil, el decano.
Tradujo el reglamento redactado en Inglaterra más de treinta años antes, les explicó la naturaleza del deporte a sus amigos y ese impulso particular provocó que se expanda el interés en toda Guayaquil. Los años posteriores se fundaron otros clubes, como Ecuador Sport Club, Guayaquil Employees Association, Libertador Bolívar.
No hay partidos documentados, pero en los primeros años del siglo XX creció la popularidad del juego en Guayaquil. Wright no pudo verlo, porque en 1900 viajó a continuar sus estudios a Inglaterra, pero su tarea estaba hecha.
En 1908, Manuel Seminario Saenz de Tejada le dio el empujón definitivo a la organización futbolística de Guayas. El Comité 18 de Septiembre que se dedicaba a conmemorar la independencia de Chile donó un trofeo, que fue el premio al primer campeón del Ecuador. Los partidos se disputaron en la Plaza Abdon Calderón y Club Sport Guayaquil derrotó a Bolívar en la final.
A los pocos días, la Municipalidad de Guayaquil organizó otro campeonato, que es reconocido como el primero de carácter oficial en el país. Club Sport Guayaquil, que contó en sus filas con Seminario Saenz de Tejada, volvió a coronarse.
En 1915 se fundó la Asociación de Football, que se dedicó a organizar las competencias, que ya contaban con una buena cantidad de clubes. Diez años después esa organización permitió la fundación de Barcelona Sporting Club y cuatro años más tarde la de Emelec. Los dos clubes más grandes de la ciudad.
La puesta en funcionamiento del ferrocarril permitió que se expanda el juego por el resto del territorio nacional. En 1906, en plena Revolución liberal, se fundó el Sport Club Quito, decano del fútbol capitalino. A los seis años se disputó el primer partido entre representantes de dos regiones: Sport Club Quito recibió a Guayaquil Sport, que ganó con contundencia por 4-0.