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El origen del fútbol en España: entre la influencia británica y el misterio Huelva-Vigo

Huelva Recreation Club (Club de Recreo de Huelva), hoy conocido como Real Club Recreativo de Huelva fue el primer club español de la historia @recreoficial

Como en toda la Europa continental, el origen del fútbol en España está directamente ligado a la influencia británica, en este caso por medio de trabajadores que llegaron al país ibérico en el último cuarto del siglo XIX.

La imprecisión de los registros de la época deja algunas incógnitas respecto al lugar exacto en el que se empezó a jugar al fútbol en España. Algunos aseguran que el balompié llegó primero a Vigo, ciudad ubicada en la comunidad autónoma de Galicia, donde se desarrolló el primer partido en 1876, con el Exiles, un equipo de ingenieros ingleses, como protagonista.

Sin embargo, la versión histórica con más fuerza ubica a la génesis del deporte más popular en Huelva, parte de la región de Andalucía. Allí, en 1878, los ingleses que trabajaban en la mina Río Tinto crearon el Río Tinto Foot-Ball Club, el primer club español de la historia, aunque la falta de registros oficiales le da el mote de decano del fútbol español al Huelva Recreation Club (Club de Recreo de Huelva), hoy conocido como Real Club Recreativo de Huelva, fundado el 23 de diciembre de 1889.

Al surgimiento del balompié en Galicia y Andalucía, donde tuvo gran injerencia el doctor escocés Williams Alexander Makay, se suman tempranas raíces en Madrid, Barcelona, que décadas después empezarían a protagonizar el partido más importante a nivel nacional, Albacete y Sevilla -otra ciudad andaluza-. De a poco, el deporte que llegaba mediante protoclubes de origen inglés y la enseñanza en el ámbito educativo le empezaba a dar lugar a la creación de clubes de fútbol, como el mencionado Recre y el Sevilla FC, fundado en 1890.

Recién comenzado el siglo XX, con el fin de regular el balompié, aparecieron las primeras asociaciones y competencias, con la Foot-Ball Associació (1900) y la Copa Macaya (1901), ambas catalanas, como pioneras. El primer intento por establecer una competencia nacional fue el Concurso Madrid de Foot-Ball Association o Copa de la Coronación (1902), disputada en la capital, una especie de predecesora de la actual Copa del Rey.

A partir de 1909 surgieron federaciones que buscaban nuclear a los clubes, pero diferencias internas y reclamos por la oficialidad estatal retrasaron el ingreso de España a la Federación Internacional de Fútbol Asociación (FIFA) como país miembro. Recién en 1913, resueltos los conflictos y con el surgimiento de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF), el país se metió en el mundo FIFA.

La Selección Española, por su parte, tiene su génesis en 1920, cuando se armó un combinado nacional para afrontar los Juegos Olímpicos de Amberes. En Bélgica, la Roja tuvo su primer gran logro: la medalla plateada en su primera competencia oficial. El equipo repitió participación en París 1924 y Ámsterdam 1928, pero no se volvió a subir al podio olímpico hasta 1992.

La aprobación del primer Reglamento del Fútbol Profesional español en 1926, tras un par de años de debate, sentó las bases para el Campeonato Nacional de Liga Profesional, que tuvo en 1929 su primera edición, ganada por el FC Barcelona. Desde entonces, se destacan dos hechos trascendentales para el fútbol hispánico: la Guerra Civil Española, que persiguió a clubes e interrumpió el torneo local durante tres temporadas, y la creación en 1984 de la Liga Nacional de Fútbol Profesional (LFP), asociación integrada por los clubes y sociedades anónimas de las categorías más altas del fútbol local que regula La Liga y la Segunda División A junto con la RFEF.

A pesar de haber sido una referencia para el fútbol europeo a lo largo de toda su historia, especialmente con el protagonismo a nivel continental y mundial de Real Madrid y Barcelona, La Liga encontró su auge durante las últimas tres décadas, merced a variados ingresos millonarios y regulaciones que globalizaron el fútbol. La 'rivalidad' contemporánea entre los dos grandes con Lionel Messi y Cristiano Ronaldo, las dos grandes figuras de la época, a la cabeza confirmó al fútbol español como el más relevante a nivel mundial hasta hace muy poco tiempo.

El clímax del seleccionado nacional coincidió con esa época: entre 2008 y 2012, la Roja consiguió un triplete histórico al ganar la Eurocopa 2008, el Mundial de Sudáfrica 2010 y la Eurocopa 2012. El triunfo en la Euro de 1964, el oro en los Juegos Olímpicos de Barcelona 1992 y la localía en el Mundial de 1982 son otros hitos de la Selección Española.

En cuanto al fútbol femenino, los primeros partidos datan de 1914, pero para contar con equipos y competencias oficiales hubo que esperar hasta fines del siglo XX. En 1971 surgieron algunos campeonatos, pero la RFEF recién reconoció al fútbol femenino en 1980, tres años antes de la aparición de la Copa de la Reina y ocho del comienzo de la liga nacional (1988/89).

Aunque la selección todavía no obtuvo grandes resultados a nivel global (un bronce en la Eurocopa de 1997 es su resultado más destacado), viene creciendo a pasos agigantados, se clasificó para los últimos tres Mundiales y aspira a disputar a corto plazo sus primeros Juegos Olímpicos. A nivel clubes, el FC Barcelona -máximo ganador en el medio local- empezó a trascender a nivel europeo durante el último lustro y ganó la UEFA Women's Champions League en 2021 (perdió las finales en 2019 y 2022).

En una clara muestra del crecimiento del fútbol femenino en el país, varios clubes vienen rompiendo plusmarcas referidas a la asistencia a los estadios, con el Barcelona-Real Madrid de fines de marzo a la cabeza (91.553 hinchas observaron el 5-2 del conjunto culé por las semis de la UWCL). Aun sin el éxito continental de los equipos masculinos (Real Madrid ganó 14 veces la Champions, récord total, y Barcelona se hizo con la Orejona en 5 ocasiones), los clubes y aficionados españoles parecen marcar el camino correcto.

En el Mundial de Qatar 2022, la Selección Española masculina buscará seguir escribiendo una historia que tiene más de un siglo y empezó, según el emisor de la historia sea sureño o norteño, con los mineros de Huelva, Andalucía o con los ingenieros de Vigo, Galicia.