Dejando a un lado aquel partido que se le escapó de las manos ante Stefanos Tsitspas en Monte-Carlo, Diego Schwartzman (15º del mundo) sostuvo el gran nivel que demuestra hace semanas y apabulló a un confuso Mackenzie McDonald (51º) con un doble 6-2 en la segunda ronda del ATP 500 de Barcelona.
Si bien es el segundo torneo sobre polvo que el norteamericano disputa en lo que va de la temporada, el nivel con el que se planta el argentino ante sus rivales es digno de temor y respeto.
En la primera manga de juego, los errores de McDonald se apoderaron en gran parte de los puntos ante la iniciativa del juego largo y desgastador por parte de la raqueta albiceleste número uno. Ya en la segunda parte y con un tenis más fluido, el peque demostró de lo que está hecho y regaló una gran cantidad de puntos que fueron los animadores principales de la fiesta del Conde de Godó.
De esta manera, Schwartzman consiguió su victoria número 16 en lo que va de la temporada y espera en octavos de final por el ganador entre el italiano Lorenzo Musetti y el británico Daniel Evans.
Pero no sólo eso, sino que su gran presente también se refleja en las estadísticas. Es la quinta vez de ocho certámenes disputados que logra acceder a esta instancia. (ATP de Córdoba, Buenos Aires, Río, Monte-Carlo y Barcelona). Todos sobre polvo de ladrillo.