Novak Djokovic (actual 6º ATP) sigue dando batalla. Elástico como pocos y con un físico que parece inquebrantable, cuesta asociarlo a un tenista de 38 años. Si bien los procesos de recuperación son cada vez más lentos -y por eso aplica una estrategia específica de cuidados previos y posteriores a cada partido para evitar lesiones-, rara vez su cuerpo le pasa factura. Sin embargo, en el cierre del encuentro ante el italiano Flavio Cobolli, por los cuartos de final de Wimbledon, sufrió una caída que encendió las alarmas. Tal fue la preocupación que este jueves se vio obligado a cancelar la práctica previa al cruce con Jannik Sinner (1º), programado para este viernes en semifinales.
"Voy a necesitar lo mejor de mí para vencer a Jannik. Eso es lo único en lo que pienso ahora: en ponerme física y mentalmente en el estado adecuado para poder luchar con él todo el tiempo que sea necesario", dijo el nacido en Belgrado en conferencia de prensa. Con esa declaración, tanto los periodistas presentes en la sala como los fanáticos que leyeron o escucharon sus palabras alrededor del mundo respiraron con algo más de tranquilidad. Sin embargo, más adelante relató cómo se sentía, tras la victoria, respecto al incidente que sufrió en pleno estadio central.
"Todo sucedió muy rápido. Me resbalé y lo sentí de inmediato; el músculo ya me venía molestando en el cuarto set, se estaba tensando, y justo en el punto de partido, llegó ese momento de mala suerte. Aun así, conseguí sacar adelante los dos siguientes. No es la primera ni será la última vez que me resbale, pero sí fue la primera este año, lo que me sorprendió porque soy un jugador al que le gusta deslizarse sobre césped. Por la tarde hay más humedad en el aire, la superficie se vuelve más resbaladiza y aumentan las chances de que algo así pase. En las próximas 24 ó 48 horas veremos la gravedad del problema y decidiremos cómo actuar", explicó.
La primera medida del 24 veces campeón de Grand Slam y su equipo fue cancelar la práctica prevista para este jueves por la tarde en Londres. No se trata de una señal de pánico, ni mucho menos -Nole ya lo hizo en otras ocasiones-, pero habrá que seguir el tema de cerca y esperar hasta el momento del partido (programado como segundo turno del día, tras el cruce entre Taylor Fritz y Carlos Alcaraz) para conocer la verdadera magnitud del golpe.
El historial entre Djokovic y Sinner está 5-4 en favor del actual número uno del mundo, que además ganó los últimos cuatro enfrentamientos. No obstante, el serbio se impuso en los dos cruces disputados en Wimbledon: en cuartos de final de 2022 y en semifinales de 2023.
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